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Despierta, arréglate, alista el traje que se pondra Sebin ese día, desayuna, atiende a tu cansado esposo antes de que se vaya, dale su desayuno, despidelo con un beso u abrazo (no olvides decirle que lo amas sin importar con que lo despidas), ten un momento para ti, ayuda a las sirvientas, almuerza, haz un postre, sal al jardín, espera a tú esposo, cena, escucha su día (obligatorio), duerman juntos.

Recuerda que a él le gusta los pechos grandes, no olvides rellenar más tu sostén.

Despierta, arréglate, alista el traje que se pondra Sebin ese día, desayuna, atiende a tu cansado esposo antes de que se vaya, dale su desayuno, despidelo con un beso u abrazo (no olvides decirle que lo amas sin importar con que lo despidas), ten un momento para ti, ayuda a las sirvientas, almuerza, haz un postre, sal al jardín, espera a tú esposo, cena, escucha su día (obligatorio), duerman juntos.

Recuerda agrandar más esa sonrisa.

Y de nuevo despierta, arréglate, alista el traje que se pondra Sebin ese día, desayuna, atiende a tu cansado esposo antes de que se vaya, dale su desayuno, despidelo con un beso u abrazo (no olvides decirle que lo amas sin importar con que lo despidas), ten un momento para ti, ayuda a las sirvientas, almuerza, haz un postre, sal al jardín, espera a tú esposo, cena, escucha su día (obligatorio), duerman juntos.

Recuerda que en la mañana te pedira disculpas por lo que hizo.

Haz las cosas que hace una buena mujer.

Hangyeom se una buena chica
                           (Un buen chico)

Todo parecía un bucle sin señal de que pararia.

Ojalá que todo desapareciera contando hasta 10, y al abrir los ojos todo fuera una más de sus pesadillas de medía noche.

Sus hermosos ojos estaban fijos en la puerta, apricionando su labio con sus dientes, en espera de su esposo.

Viendo en sus manos una cuantas marcas rojas debido a las quemaduras que se habia hecho al hacer el postre.

Salió de sus pensamientos al escuchar la puerta ser abierta, y ver la silueta de Sebin pasar por el umbral, y este al verlo le sonrió.

- Hola, preciosa - le saludó. - ¿cómo estuvo tú día? - Le preguntó, mientras pasaba uno de sus brazos por su cintura y dejaba un beso en una de sus mejillas.

- Cansado - le dijo. - pero nada que estar con mi esposo no arregle - mintió para luego dejar un beso en la comisura de sus labios.

Él al escuchar aquello sonríe con orgullo, y caminan en dirección a el comedor.

Y repetir esa rutina que en algún momento haría que enloqueciera.

"Se buena preciosa, y sere bueno contigo"

Linda   ||   SeGyeomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora