Capítulo 16

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20 de Diciembre.

Querido diario,

Aún estoy emocionada de haber leído todo lo que mi amado novio escribió en todas estas hojas. Ahora solo ansió escribirle algo bello a él, para que lo pueda leer y sepa que yo siempre lo llevo aquí en mi corazón.

Miró su fotografía en mi escritorio, junto a mí y me lleno de suspiros, risas y sueños locos.

Esos sueños que él sabe de qué tratan. En especial de uno, el de yo tener un bebe suyo y del que a él le encantaría que así fuera...

Di un suspiro y comencé a escribir de nuestra primera noche juntos.

Nuestra primera noche especial

Nos fuimos a la playa solos por todo ese fin de semana. Queríamos rememorar aquel día cuando nos conocimos por primera vez, fuera de su trabajo, y yo no como una fan suya.

Abrazados, miramos el sereno mar frente a ambos. Sentimos la fresca brisa en nuestras mejillas y yo sonreí. Él me miró y contempló mi sonrisa.

_ ¿Sabías que te amo más que a nada niña mía? – le sonreí.

_ Mmm, no lo sé. Hoy no me lo has dicho – me sonrió pícaro, me tomó con cariño de la cintura y me aferró a sus brazos, lo que me encanto.

_ ¿Ah sí que hoy no te lo he dicho?

_ Mmm, no

_ Ven aquí

Me dijo todo seductor y comenzó a besarme, lo que me hizo amarlo aún más y solo perderme en él, en sus labios y brazos.

En la cabaña...

Se había puesto muy helado, crují los dientes y miré las estrellas en el cielo. Joey se me acercó y me tomó por la espalda. Yo lo miré con mi perdura sonrisa y él me sonrió tierno.

_ ¿Tienes frío?

_ Sí, me estoy congelando

_ ¿Quieres que te traiga un suéter?

_ No, así contigo estoy bien – se rió y luego besó mi cabeza.

_ Mi niña hermosa. Estoy tan feliz de que estemos aquí esta noche. Que estés conmigo – levanté la cabeza para mirarlo y le acaricié su rostro.

_ Mi Joey – me miró perdidamente.

_ Te amo María José

_ Y yo te amo a ti mi Joey

Nos miramos a los ojos y luego nos acercamos lentamente y comenzamos a besarnos.

Sentí que no quería parar; quería que Joey siguiera besándome y ambos nos abrazamos fuerte. Él me besó más apasionado y yo estallé de deseos porque él me tocará.

Joey me arrinconó a la ventana, yo le acaricié toda su enorme espalda y él vibró de deseos.

Respiramos agitados, nos miramos y Joey sostuvo mi rostro entre sus manos.

Nerviosa, él lo advirtió.

_ ¿Estás bien?

_... Un poco nerviosa

_ Tranquila. Si no estás segura de hacer esto lo entenderé – lo abrasé y él sonrió tierno a mi espalda.

_ Si quiero. Quiero estar contigo, pero no sé cómo. Nunca he estado con un hombre – volvió a sonreír.

_ Lo sé y eso me convierte en un hombre muy afortunado

_ Oh Joey – acarició mi mejilla.

_ Te amo mi María José

_ Y yo, y yo

Le alcancé a decir y él sin soltar mi rostro, acercó mis labios a los suyos y otra vez nos dimos un largo y apasionado beso.

Sin dejar de besarnos, rodeé su cuello entre mis brazos y Joey me tumbó en sus brazos.

Era una sensación nueva; mis emociones y sentimientos estaban a flor de piel y aunque estaba muy nerviosa, mis deseos de que Joey me hiciera suya eran aún más.

Nos dimos un beso con lengua; me fascinó y él ardiente, empezó a besar mi cuello y acarició uno de mis pechos.

_ ¡Ay, Joey! – me miró intenso.

_ Shuuu tranquila y solo disfruta mi nena...

Cerré los ojos de placer y él tierno, volvió a darme otro rico beso con lengua y yo me le recargué en sus brazos.

Me pareció tan divino verlo desnudo. Sus pectorales con sus pequeños bellos me volvieron loca y con el corazón atorado a la garganta de encanto y de nervios, él miró mis pechos y sonrió vibrante.

_ Eres realmente preciosa María José

_ Mi Joey

_ Te amo. Te amo demasiado

Volvimos a besarnos, y nos abrazamos, ahora desnudos. Fue una sensación que me hizo estallar de deseos; sentir su piel junto a la mía fue increíble y muy erótico.

Besándonos sin parar, nos recostamos suavemente en la cama y Joey se colocó sobre mí para acariciarme y contemplar mis ojos.

Apoyó todo su cuerpo en sus brazos para no aplastarme y ya muy ardiente, me miró y yo acaricié su ya transpirado rostro.

No me contuve y acaricié su trasero. Joey me sonrió intenso y provocativo.

_ Seré lo más dulce. Te lo prometo – me susurró y yo le dije un sí con la cabeza.

Volvimos a besarnos.

Gemimos sin parar. Acarició todo mi cuerpo y yo aferrada a sus brazos, le gemí con placer.

Él me observó, yo me perdí en sus seductores ojos y él embistiéndome, yo me aferré a su pecho; lo que a él le provocó más placer.

_ ¡Ay!

_... Oh, sí... Eres mía niña mía, mía...

_... Joey...

De pronto elevó las embestidas. Estaba extasiado y lleno de placer al sentirse dentro de mí.

Me miró perdidamente y yo con la respiración entre cortada, él acarició mi mejilla.

_ Te amo

_ Y yo a ti

Volvimos a besarnos, él me colocó arriba suyo y yo deseosa de él, comencé a montarlo y él estalló de placer.

Observó todo mi cuerpo arriba de él y más se excitó. Acarició con delirio y afán mis pechos, cintura y me ayudó a moverme para mantener mis dulces embestidas que lo estremecían.

_ Oh mi amor...

Pudo concordar y yo perdida en él, me le tiré a sus labios y él rodeó mi espalda con sus brazos y nos besamos hasta que acabamos.

Me sonrió y yo transpirada al igual que él, acarició mi rostro y besó mi hombro.

_ ¿Cómo estás?

_ Bien, un poco cansada ¿Y tú? – le sonreí y él tomó mi mano.

_ Feliz. Estuvo increíble

_ ¿En serio?

_ Si mi amor. Hicimos el amor y fue lo más bello de mi vida

_ Y de la mía. Me entregué a ti Joey, a ti

_ Si. Solo a mí y ahora te amo más por eso

_ Te amo

Le dije y nos besamos y abrazamos plenos y realizados.

Sonreí al recordar aquel imborrable y bonito recuerdo; volví a abrazar el diario a mi pecho y solo pensé en mi amado Joey.


Otros días más...

Sus ojos vibraron al leer lo último que yo había escrito y rememoró cada instante y detalle cuando hicimos el amor por primera vez...

Tomó el diario y comenzó a escribir...

"Nuestro Diario de Amor" { Joey Tempest }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora