Capítulo 2

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Estaba andando por los pasillos, y no encontraba la clase. Ya me di por vencida, y fui a sala de profesores. Un profesor me indicó muy amablemente el camino.
Llegue a la puerta de la clase que me tocaba y toqué la puerta, hoy a una mujer decirme que pasará. Agarré el pomo y lo gire. Empuje la puerta y, no podía ser.
Maldiciones, esta Catalina, Hugo, entré otros que serian también populares, por que estaban hablando al verme, estaba gente que no habia visto nunca, parecían los típicos alumnos, y por último estaban el grupito chungo, con los que me habia fumado el cigarro.

-Señorita, pase. No se quede pasmada hay.~Dijo la profesora seriamente ~¿Por que llega tarde?

-Perdona.~Pase a la clase~ Llegue tarde por que me extravíe.

-Que no vuelva a pasar. Sientese. Y digame su nombre.

-Sharipha, señora. ~Me adentré en la clase y tomé unos de los asientos que estaban libres~

-Vale. Seguimos la clase. Como bien estaba cobrando, esta asignatura esta orientada a la ciencia. ~Comenzo a explicar la profesora~

La clase trascurrió cogiendo apuntes de todo. Cuando concluyó la clase, todos salimos a las taquillas. Mala suerte la mía que la taquilla de a lado era la de la Barbie. Abrí la taquilla para verla, era espaciosa. Y mañana estaría llena de libros y cuadernos.

-Señorita Sharipha~Dijo a mi espalda el capitán de fútbol ~

Me gire y lo mire extrañada. Me hablaba a mí. Increíble pero cierto.

-Buenos días Hugo, no es que no podía sentarme a tu lado, o algo así.

-No seas rencorosa. Antes era diferente habia mucha gente.~Miro a todos los lugares~No ves que no hay nadie.

-Eres un poco capullo. No soy una payasa para que te ocultes para hablarme. ~Mire la taquilla de la Barbie, le señale su nombre ~ Mira habla con Catalina, de ella no te avergonzarías, ya que es de tu clase social, vaya ella una barbie, y tu un ken. Adiós, tengo clase y ya voy 10 minutos tarde, sin olvidar que no hablo con muñequillos.

Di la conversación por acabada y comencé a caminar, su cara era confusa y su mirada de mucho enfado. Iba mirando todas las puertas hasta que di con la mía. Me tocaba Física y Química. Una vez abrí la puerta, ahí adentro vi de nuevo a Kinnet, esta vez andaba sentado sólo. Él profesor me miró, haciendo un gesto con la cabeza para que pasará.

-Perdón, nuevamente profesor.

-Eres nueva. Es normal, ahora sientese señorita.

-Gracias.~Agache mi cabeza y entre en la clase~

Me senté a lado de Kinnet. Él me miró negó con la cabeza, y siguió con sus apuntes.
Acabó la clase, y éste agarró mi muñeca para que no saliera corriendo.

-¿Por que no dejas de ir sola y llegar tardé? ¿O es que te gusta llegar tarde? ~Me miró esperando respuesta, alzando la ceja~

-Me entretuve, mirando la taquilla y viendo la lista de libros y material, y luego me hablaron... Y para ser sincera luego no supe donde ir, tuve que ir mirando todos los números marcados en las puertas.

-Bueno vamos a Matemáticas.

-Sí, ahora.

Lo seguí hasta la clase, al fin no llegue tarde a una clase. Entramos y nos sentamos juntos. Sacó su cuaderno y su bolígrafo azul, yo hice lo mismo. Al minuto o cosa así entro el profesor. Comenzó a dar si clase, la verdad que explicaba muy bien. Para lo torpe que era yo con los números estaba flipando, por que entendí lo poco que nos explicó. La clase concluyó a los 60 minutos.

-Que ¿Vienes conmigo?

-Si, lo prefiero. No quiero llegar tarde.

-Sabes que ahora es el descanso ¿Verdad?~Me dijo obvió ~

-Ciertamente no me acordaba de eso ~Saque la lengua, y me rasque la nuca ~

~No te preocupes, vamos.~Me dijo nuevamente sonriendo~

Comenzamos a caminar. Este chico tiene algo increíble.
Estábamos Rubieles, Morenazo, Kinnet y yo. Cuando una chica de pelo multicolor y ojos oscuros se aproximaba a la mesa en la que estábamos tomandos un café y unos bollitos de crema. La chica llego a la mesa, puso sus manos en la pesa, me miro desafiante, yo se la devolví de igual manera.

-Hola. ¿No sabes mandar un WhatsApp? ~Solto la chica algo enfadada~

-Sí, pero no me acorde.~Dijo Kinnet~

¿Quien es esta chica?
¿Por que esta tan enojada, por lo del WhatsApp?
¿Por que me mira mal?
¿De que carajos conoce a Kinnet?

-No te a cuerdas de mí, me parece muy feo por tu parte ~Dijo alterada, y con enojo~

-No dije eso. ~Suspiro, echándose para atrás ~

-¿A no? ¿Quien es esta tipa? ~Siguia con el mismo tono desagradable~

-Es la chica nueva de mi clase. ~Dijo con mucha serenidad~Se llama Sharipha, por favor habla con respeto hacía las personas, Isabelina.

-Hablo como me viene en gana~Dijo mas enogada~ eres mi maldito novio y no me mandas un maldito WhatsApp para decirme ¿Como estas? Yo estoy bien, estoy en el descanso, luego te veo. ~Dijo cada vez mas enojada, su cara era roja del enfado que se traía ~

-Para un poco. ~Dijo para calmarla. Su tono era dulce~Ven aquí ~Le tiró del brazo y la sentó en sus piernas~ Calmate ¿Si?

-Vale amor. Es que quiero saber de ti. ~Dijo muy tierna y lo besó ~

Yo miré a otro lado. Los amigos miraban a Isabelina con mala cara. Luego me miraron y hicieron una mojiqueta de desagrado.

-Sharipha, vamos a fumarnos uno antes de entrar ¿Te vienes? ~Dijo Morenazo, mientras Rubiales y él se ponían en pié ~

-Os acompaño~Dijo Kinnet~

Pero antes que se pusiera en pié con ella.

-No tu quedate con ella.~Dijo Rubieles, y Kinnet se sentó de nuevo, con esa en sus piernas~

Salimos fuera y nos encendimos el cigarro.

-¿No os cae bien Isabelina? ~Pregunte~

-No, a ninguno nos cae bien y Kinnet lo sabe. No se aún que le ve.~Dijo Morenazo, como algo cansado de tal persona~

-Bueno ya pasara. Si no es buena, el se dara cuenta, aunque quizás deba aparecer una chica, la correcta.~Explique, y di una calada~

-¿Que te toca ahora?~Me pregunto~

-Me toca Inglés de segundo idioma.

-Estarás con Kinnet, y el que pensaba que estaría solo en esa clase.

Sentía como alguien se aproximaba por detrás, Morenazo y Rubiales hicieron un gesto con la mano en forma de saludo. Me volteé y Kinnet estaba ahy parado, se encogió de hombros.

-Lo siento. ~Se disculpó mirando a todos~ Bueno me voy a mi clase, en solitario.

-Espera.~Le dije caminando hacía él ~ Tengo la misma que tú.

-A genial, vamos en tonces.

Caminábamos por el pasillo. Cuando me agarró del brazo y me paró. Se puso frente a frente conmigo, eso si las distancias se guardaban.

-Perdona, perdona por lo de Isabelina.~Dijo bajando su mirada ~

-No pasa nada. Vamos que llegaré a la tercera clase tarde del día.

-Cierto. Disculpadme.

-No hay problema.

Entramos en la clase. Y tomamos asiento. La profesora paso unos folios y nos dijo que hiciéramos una redacción de nuestro verano.

¿Que pongo? Que me pase todo el verano de 18:00h a 21:00h tomando cervecitas en el parque, entre cigarritos y porritos. Y que los viernes, sábado y domingo, no aparecía por casa desde las 21:00h a 7:00h. Sin olvidar que el resto del día la pasaba en la cama, en el pc y en el móvil. Bueno también ayudaba en las tareas de la casa, limpiaba mi habitación, los baños, y ayudaba en la cosina y comedor. Pero eso solo me ocupaba 2 horas de mí día.

Entre Dos Caminos. El acertado y el equivocado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora