Entre Dos Caminos. El acertado y el equivocado.

Capítulo 10

Me quité el pijama. Me metí en la ducha, para ver luego a Kinnet. No entendía por que estaba tan emocionada.
Luego de ponerme unas mayas moradas, una blusa roja y unos botines rojos. Me peine como siempre y me pinte de igual manera. Cogí mi móvil y entre en WhatsApp.

Estado de Kinnet: Escuchar Estopa por la mañana si señor! Te deseo ver ya cielo!

Yo: Tus estados te delatan
Jejeje
Me deseas ver?
O a otra?

Mi Kinnet: A ti...
Eres la razón de mi sonrisa.
Son indirectas muy directas.

Yo: Me di cuenta.
Ven a por mi y llevame dónde quieras.

Mi Kinnet: No me tientes
Que si hay algo que me gusta es....
Comer bombones
Contempla monumentos
Y tocar tu cuerpo
:p

Yo: A donde me llevaras?

Mi Kinnet: Sorpresa cielito.

Yo: Vale.

Al ver que salió sin contestar, yo salí de WhatsApp.
Fui a desayunar. Estaba esperando a Kinnet, cuando recibí un WhatsApp.

Entre en WhatsApp:

Estado de Hugo: Hoy tengo ganas de tenerte a ti.

Conversación con Hugo:

Ken: Q'aras est mñn?

Yo: Pues mirar la tarea

Ken: Vale a la tarde eres mia...
Si o si

Yo: Vale te veo luego.

Ken: Adiós cosa linda.

Salí de WhatsApp. Me despedí de mis abuelos y salí al porche. Al ratito vino Kinnet, en su moto.

-Vamos sube, y tapate pos ojos~Me dio un pañuelo, el cual me puse tapando mis ojos~

-No me matarás.

-Eso jamás. Agarrate suerte.

Después de un rato sintiéndome como una ciega. Paro la moto y me bajo de ella, luego ne cogió en sus brazos y notaba como caminaba. Se hoy como césped, y olía a pino, me empezó a dar miedo. Me soltó en el suelo, sonó crujir la madera. Y note como desabrochaba y caía lo que tapaba mis ojos, el pañuelo negro, que puso anudado luego en unas de mis muñecas. Miré y estaba en una cabaña, muy acogedora, en la mesa había un zumo, y unos donut.

-¿Donde estamos?

-En la casa de invitados, de mi casa. ~Se izo a un lado , y me invito a sentarme~ esperó que te guste el desayuno.

-Claro que sí. Aún que ya lo tomé.

-Bueno si no quieres no pasa nada. ~Beso mi mejilla~.

Cogió el vaso de sumo y se lo comenzó a tomar.

-¿Me quieres follar?~Dije con temor~

Él comenzó a toser, le salió zumo hasta por la nariz.

-¿Que?~Sigui tosiendo~

-No te mueras cielo.

-Es que.... Yo no quiero follarte.

-¿A no te gusto?~Dije disgustada ~

-No es eso, preciosa tranquila.

-En una casita solos, tu y yo. ¿Como pretendes que tenga tranquilidad?

- Por que yo no te haré nada. Primero que no haré nada que tu no quieras y segundó nada que no estés con todos tus sentido encondiciones. Ósea ni con una copa de alcohol, ni con ninguna sustancia consumida.