A veces deseo que mueras

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Un médico capaz penetra en la constitución con un solo examen y cura el cuerpo con simple magia curativa. Aunque Gorten muriera, no tenía intención de presentar al Emperador al médico de Delua.

Yvonne asintió, y Mary Ann salió a llamar al médico con cara de pocos amigos. Para Yvonne, todo esto era simplemente oscuro. Ni siquiera se sintió motivada para decir algo a Gorten. No había nada que decir con su determinación de proteger al hijo, cuyos padres habían muerto a manos del Duque de Delua, de la hija de ese mismo Duque.

"Su Majestad, ¿cuánto tomó de la medicina que le di?"

El médico del Emperador, que llegó poco después, consultó y preguntó con rostro serio.

"Tomó una o dos botellas casi todos los días".

Gorten fue quien respondió. Fue porque Karloi no podía responder por sí mismo.

"¿Perdón? ¿Está diciendo que había una congestión tan frecuente?"

"Bueno, es cierto que se hizo un examen médico adecuado. Lo que pasa es que me siento incómodo todos los días".

El médico frunció el ceño.

"Su Majestad, ¿es correcto que tenía una congestión?"

"...Sólo sentí un poco de náuseas".

"Su Majestad, el fármaco causaría un dolor grave si se tomara una sobredosis en un estómago sano".

"¡No, me refiero a que dejaste mucho de ese tipo de medicina!"

El médico se avergonzó. No, al principio fue una congestión. El Emperador calmó al enfurecido jefe si todavía entendía la injusticia.

"...Gorten, por favor, cierra la boca".

No sabe a qué viene el alboroto en la habitación de la Emperatriz.

Karloi ha vuelto a sentirse frustrado por la mirada de Yvonne hacia él.

El médico lee con sensibilidad los síntomas del Emperador.

"Majestad, ¿ha habido alguna molestia o inconveniente estos días? Creo que empezó hace un mes. Cuando eso ocurre a menudo, le hace sentirse frustrado. No hay que tomar medicamentos, hay que resolver el problema".

"...No hay tal cosa, así que dame analgésicos y vuelve".

Karloi respondió, pero todos en la habitación pensaban lo mismo. En un mes, sólo había una cosa nueva para Karloi.

Los frecuentes encuentros con Yvonne.

En el momento en que Yvonne entendió sus corteses palabras de "algo molesto e incómodo", quiso taparse la cara. Porque ella ni siquiera sabía qué tipo de expresión estaba haciendo en este momento.

"Gorten, estoy realmente bien ahora, así que vete".

"Pero Su Majestad..."

"¿Todavía quedan más groserías por hacer?"

Inclinó la cabeza hacia Yvonne como un cachorro, que se dio cuenta de que Gorten acababa de ser apuñalado por las afiladas palabras de Karloi.

"Fui frívolo y despiadado, Su Majestad, la Emperatriz. Me tomaré el castigo en serio".

Al principio había sospechado que Yvonne había hecho algo, pero sólo fue por una simple sobredosis de drogas. Por supuesto, sabía que la propia Yvonne era la causante de esa sobredosis, pero ese hecho también agudizó los nervios de Yvonne.

"Gorten..."

Yvonne le habló a Gorten en voz baja. Gorten se inclinó más.

"Si hubiera decidido hacer daño a Su Majestad, ¿qué habría pasado?"