A veces deseo que mueras

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"Clyde Anssen parece un poco diferente del Conde Anssen. Parece un hombre bastante útil".

Karloi abrió la boca con indiferencia. Por el contrario, Alexis y el marqués de Roden vieron las señales. No parecían saber hasta dónde debían decir desde que Yvonne estaba aquí. Alexis suspiró levemente mientras Karloi los miraba con desprecio.

"No lo sé. Pero, como dijo el conde Anssen, es peligroso darle un gran premio. Tal vez sea mejor dárselo a Mach".

"¿Hmm? Creo que es una estupidez hacer eso sólo porque es un hijo ilegítimo".

Karloi expresó una débil oposición, y Keana intervino de repente en la conversación

"Su Majestad tiene razón, duquesa Dunya. La ley común discriminatoria de Croysen es contradictoria".

La Reina parecía estar muy interesada en este tema.

"Incluso en Mach, considerado incivilizado por la ley, no se discrimina a los hijos ilegítimos".

Ante las palabras de Keana, el marqués de Roden miró a su hija con cara de irritación.

"En cambio, Mach maltrata a los esclavos de forma más brutal que cualquier otro país. Hay cosas inevitables en todas partes".

"¿Está diciendo que es inevitable estar atrasado, padre?"

"Es una costumbre muy arraigada. Admitir tener un hijo ilegítimo".

El marqués de Roden miró a su hija como a un niño.

"Es una idea que nadie, desde los nobles hasta los plebeyos, acepta de buen grado. Es en Croysen donde es un delito engañar que eres un hijo ilegítimo".

"Pero Su Majestad necesita una nueva fuerza de todos modos. Un medio noble que fue atrapado escondiendo a su hijo ilegítimo, divorciado o encarcelado, haría unos cuantos carros. ¿Por qué no podemos usarlos de nuevo?"

Yvonne escuchó sin comprender la conversación entre padre e hija. Era muy interesante tener una conversación sobre un hijo ilegítimo justo delante de ella. De repente, algunas piezas se juntaron en la cabeza de Yvonne, que era indiferente a la historia que no tenía nada que ver con ella pero que estaba sutilmente relacionada con ella.

"¿Nuevas fuerzas de hijos ilegítimos? Qué tontería!"

"No tiene que reírse así de mí, padre".

Los ojos y la actitud de Clyde Anssen y Keana Roden. Clyde, que rechazó un título en Mach y volvió a Croysen, y Keana, que desprecia la actitud de Croysen hacia los hijos ilegítimos.

Algo no parecía encajar.

"¿Qué clase de poder da eso? Desde que la duquesa Dunya regresó, muchos otros nobles se han unido, así que no hay necesidad de tal fuerza".

"Roden, necesito un socio cercano a Delua".

"Clyde Anssen es sólo un medio hermano que es despreciado por sus ayudantes. Y, francamente, no me importa cómo lo trataron los Anssen".

"Su Majestad la Reina parece pensar en consonancia con la nueva era".

El marqués resopló ante los comentarios moderadamente mediadores de Alexis. Parecía una rata temblando cada vez, y cuando Anssen se acercaba, parecía una persona diferente. No, más bien parecía un ratón diferente, un ratón chillón.

"Estoy de acuerdo con la Reina, Roden. Es una mala práctica para el futuro de Croysen. ¿No es eso contradictorio a los ojos de cualquiera? Es como si estuvieras descargando tu ira".

"Su Majestad, ¿de qué está hablando? ¿Qué quiere decir con desahogar mi ira?"

"Padre, Su Majestad tiene razón. Su Majestad y yo pensamos que Croysen ha estado discriminando la ira de una nación débil. ¿No es una especie de resentimiento?"