-Por qué tu hermano trata de complicarme la existencia? Por su causa tuve que traer a Bastian para adelantar las clases de sucesión y dejarlo preparado para cuándo tome el trono. No te rías!- mi padre estaba ahogado en documentos
-Pfft lo siento, es que es cómico ver como al que apartaste se volvió más útil. Lo lamento por Bastian que debe aprender varios idiomas a partir de ahora si quiere comerciar con los aliados- mi madre me miraba con recelo
-Sus movimientos fueron acertados y el trato con los parientes de Anies y el Khan nos proporcionó no salir corriendo a pedir socorro a Verbena en cuanto a los hornos. Pareciera que esta preparando algo grande con el último pedido de metales pero su carta no decía mucho salvo...- sentí que pronto ocurriría algo
-Mi hermano mayor se volvió otra persona después de casi morir envenenado. Tal parece que ahora se dedica a fastidiar a quienes intentaron matarlo y no encontró mejor forma que creando un desastre- Bastian fingía que le molestaba pero en realidad quería ser como Sylvester
La conversación fue interrumpida por Anies que regresó del criadero con varias cartas.
-Ahora qué? No hace una semana que recibimos noticias y ya envío otra correspondencia- mi padre se sostuvo de la silla temeroso
Cuando las cartas llegaban los nervios aumentaban pues no sabíamos que contenían. Hace un mes, Sylvester informó que se encargó de las lacras de Piri y obtuvo los hornos para fabricar armas y medios de transporte para la nieve. Desde ahí, todo se fue al demonio.
Invitaciones, reuniones y hasta permisos de circulación comenzaron a llegar desde el otro lado de la cordillera. Los países orientales comenzaron a usar los túneles de Anatoli para avanzar de nuestro lado al igual que nosotros y la mayoría buscaba congraciarse con Sylvester por los favores recibidos.
Lo que sea que les haya entregado surtió un efecto mágico que lo consagró como un mensajero de los dioses. Sylvester en cambio, se burlaba de su situación tildándolo de absurdo e insignificante a comparación de lo que se avecinaba.
Hace una semana, nos notificó que los mensajeros de Piri habían llegado a los fuertes en la frontera pero al ver que estaban habitados por kadaneses, creyeron que habían sido invadidos cuando admitieron que ejecutaron a los oficiales sin ahondar más en el asunto, dejando a los pirinos estremecidos.
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Ellas me quieren muerto
FantasíaEste es el tercer intento y solo ansío volver a casa. En la primera fui seducido por la heroína para romper mi compromiso con mi prometida la villana, sin saber que ambas se confabularon para traicionarme y termine siendo exiliado. Luego apareció un...