Varias bebidas y una comida deliciosa y normal más tarde, caminábamos fuera del restaurante, sonriendo. Apoyé mi mano en el hueco de su brazo, habiendo bebido lo suficiente, y tenido la suficiente conversación para permitírmelo.
Me encontré a mí misma demasiado a gusto junto a Jisoo. Eso era un error de cabo a rabo, pero cuando me sonrió, me temblaban las rodillas, y más aún la resolución.
No paraba de repetirme que ella era un ser sobrenatural. Eso significaba malas noticias para Ning, y por lo tanto, para mí. Sencillamente era lo que debía evitar. Citas.
Jisoo significaba Alianzas políticas, las cuales no podía ni siquiera comenzar a entender, enemigos mortales (con superpoderes todos ellos), y todo tipo de problemas. Como humana al margen de estos temas, sabía lo justo del funcionamiento de la Sociedad Secreta, pero había niveles de los cuales no debería saber nada. Todo lo que sabía de ella hasta ahora, era que se convertía en una voraz, puma come—hombres a la luz de la luna llena.
Sospechosa, miré hacia el cielo. No había una luna llena. Bien.
Todo acerca del desarrollo de nuestra cita me dijo que huyese, y huyese muy rápido. Pero ella era encantadora, divertida, y muy, muy sexy. Escuchó todo lo que dije con una mirada interesada en su rostro. Podría hablar de los extraños planes de BoA en la oficina, y sabía que lo entendería, porque era parte de la Alianza. Se veía seductoramente libre, más aún cuando se río de mis anécdotas.
Además, aprendí un poco acerca de ella. Jisoo era la hija mayor de su familia y tenía tres hermanos más jóvenes. Su padre murió cuando tenía dieciocho años, y su madre vivía en California con su segundo esposo, un were—león. Amaba a su clan. Era la jefa de la Alianza Paranormal y poseía una gran empresa de seguridad formado por cambiadores.
Ella era... agradable. Me gustaba. Aunque no debería gustarme, tampoco. Ning estaría en peligro si yo permitiese que mis sentimientos hacia alguien, especialmente un ser supernatural, se interpusiese entre nosotras. Yo era su escudo contra el mundo.
Perdida en mis pensamientos, yo estaba callada mientras salíamos del restaurante. Ninguna de las dos hablaba, pero ella aún seguía sujetando mi brazo en el suyo, posesivamente. Había una parada de taxis bajando la calle, pero empezó a alejarse de la parada de taxis y se dirigió hacia el estacionamiento privado del restaurante. Ahí se disipó mi feliz y casi burbujeante humor. Me detuve.
—Me parece que es hora de volver a casa.
—¿Quieres ir a tomar una copa en alguna parte? —Su mano se deslizó por encima de mi hombro. Sujetándome de nuevo. Su mano era muy cálida y se sentía muy bien contra mi piel desnuda, pero yo no podía permitirme estas debilidades.
—No voy a ir a un hotel contigo.
Sus labios se torcieron.
—No voy a mentir, me encantaría tenerte en mi cama. Pero estaba pensando más en la línea de tomar algo, una copa. O café, si lo prefieres.
Claro, y yo estaba tarareando Dixie.
—Nop, gracias. —Me aparté y me volví hacia la parada de taxis.
Cuando un coche se detuvo, Jisoo me abrió la puerta.
Antes de que pudiera entrar, inesperadamente, ella cerró la puerta. Irritada, le di un golpe en el brazo.
—¿Pero qué...?
—Shhh —dijo, volviéndose hacia mí. Tenía los ojos entrecerrados, como los de un gato, brillando en un color verde amarillento, reflejando la luz.
La miré con la boca abierta por la sorpresa. Parecía que estuviese olfateando el aire, como si buscase la ubicación de algo. Quería preguntarle qué le pasaba, pero me acordé de su petición de silencio, y decidí hacerle caso.
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midnight liaisons!
FanfictionSE BUSCA Hembra humana soltera para unirse con una were-puma soltera, encantadora y adinerada para una noche de diversión romántica... y tal vez más. Mi atractivo incluye protegerte de lo peor que el mundo sobrenatural tiene para ofrecer. ¿Lista pa...