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Amar, ese sentimiento extraño que había conocido era nuevo e interesante para él, sus mejillas dolían cuando sonreía mucho, sus ojos siempre brillaban con la luz del sol o con la presencia del chico, algunas personas dirían que era una etapa y que sus gustos no se inclinaban de tal forma descarada pero su corazón y sus emociones le afirmaban.

Vivir bajo el techo de una mujer que su segundo hogar -si no es que el primero- era aquella capilla donde rezaban cada domingo a las 6 y 7 de la mañana, no era un obstáculo fácil. Las inseguridades que había ganado cuando su madre comenzó a implicarle el concepto de perfección a todas sus acciones habían acabado con su confianza a sí mismo, si hablaba estaba mal si no lo hacía de una forma inteligente, aquella sensación de sentirse inseguro en medio de tanta gente había sido sanada con aquella coqueta sonrisa que solo le pertenecía a Jeon YunHo.

Sonrió de forma inquieta, era como ver y sentirse un niño pequeño en su resplandor por conseguir un hermoso regalo. YunHo tomo la mano de Yeosang de forma discreta, la oscuridad del cine y el tipo de película que habían optado por ver ya que a ese tipo de funciones no acudía más que dos personas máximo.

Eran ellos dos sentados en los asientos traseros de la sala mientras que había una pareja heterosexual de ancianos mirando la película en los asientos del principio, aunque su sueño había sido el que gano.

La inexperiencia que Kang poseía no era ni un nivel 0, en su vida había tocado los labios de una persona, había mantenido cierta distancia entre el amor y el, era tan difícil contradecir los sentimientos cuando había conocido al alto en aquella fiesta. YunHo giro su cabeza para encontrar o al menos tratar de cruzar mirada con aquel lindo chico de tez pálida, sus mejillas estaban ligeramente rojizas y sus labios estaban siendo apretados por el mismo dueño.

La delgada mano de Jeong sujeto la delicada mano de Yeosang llamando así su atención, una sonrisa nerviosa apareció, era su primera salida como novios, era su primera salida estando en una relación, la cercanía del alto comenzó a hacerse más notoria, aquel acercamiento estaba avisando un previo beso. Entonces la palma de Kang detuvo al alto de forma inesperada, su cabeza se inclinó un poco y rio de forma baja.

    - Yeosang, estoy llegando a la conclusión que me has rechazado mis propuestas de beso desde que te pedí ser mi pareja – YunHo se incorporó en el asiento y bebió un poco de aquella bebida gaseosa.

    - Lo sé y no quiero que suene tonto para alguien como tú que seguramente ya lo ha hecho más veces que yo – aquello había llamado la atención de Jeong que solo dejo toda su atención en los labios de Yeosang. – Aunque parezca imposible, no he besado a nadie y si me besas no quiero que veas mi poca experiencia

Los labios de Yeosang se juntaron haciendo un ligero puchero a lo que YunHo solo soltó una carcajada baja, la inocencia que había encontrado con aquel chico era tan delicada como una hoja.

    - Si no me dejas besarte jamás aprenderás, si no me dejas unir mis labios con los tuyos no sabrás como se siente y si no me dejar sentirte jamás poder ver tu lado más hermoso – YunHo se acercó nuevamente de forma más descarada esta vez, su mano levanto aquel objeto que se usaba para recargar los brazos, quito todo tipo de obstáculo del camino para poder besar a Yeosang.

Los ojos del más bajo se cerraron de forma inmediata, el corazón de ambos se había sincronizado, el latir era tan extraordinario que YunHo rompió todo tipo de barrera para poder acercarse a aquel chico.

Su mano se deslizo por el cuello del pálido acercándolo así, junto con suavidad sus labios con los del más bajo sintiendo como se tensaban más y más, rozo ligeramente aquellos sedosos labios y abrió con ligereza la boca de Kang, junto sus labios con el labio superior de Yeosang, la tensión que el chico más bajo había hecho anteriormente se fue debilitando dejándolos libres y al servicio de YunHo.

Los labios de aquel maestro eran tan cálidos, sus impulsos no eran de mucha ayuda, hacían que el beso se detuviera y volviera a comenzar, practicar aquel beso con Jeong no estaba en sus planes, la cálida mano de YunHo hizo que Yeosang se acercara un poco más a su cuerpo y poder así tomarlo como deseaba, su boca humedeció el labio superior del bajo para después seguir humedeciendo la parte inferior, aquella línea un poco más gruesa de Yeosang se liberó por completo cuando por impulso de este sujeto el labio de YunHo; teniendo el beso, sus ojos se abrieron encontrándose con una imagen adorable – Yeosang mantenía los diamantes que tenía por ojos cerrados, estaba dispuesto a cualquier enseñanza – entonces volvió a cerrarlos y seguir besando aquellos hermosos labios los cuales eran una especie de adicción al momento que los probo, tal vez era la suavidad que tenían o era el aspecto que Yeosang tenía cuando cerraba sus ojos y esperaba un beso del alto. 

Su cuerpo se alejó por necesidad y sonrió cuando observo el colorete natural que tenían las mejillas redondas de Yeosang, su rostro era magnifico y delicado, las líneas que recorrían cada parte de este eran limpias y deslumbrantes, su sonrisa era aún más encantadora con cada día que pasaba a su lado, el dar primer paso para que aquel chico accediera a lo desconocido era importante de recordar, no sentía atracción por alguien más, era como si solo existiera aquel chico bajo llamado Kang Yeosang.

Era la primera relación de Yeosang y debía amarlo como merecía y como lo pedía su corazón.

      - Resulta que es muy adictivo el besar – La voz de Yeosang se logró escuchar cuando las luces de la sala se encendieron al finalizar la función. – Es realmente curioso besarte

     - Eres tan hermoso – Jeong hablo rápidamente antes de acercarse y besar los labios del menor por unos segundos, se detuvo y se puso de pie. Sabía que acaba de captar más la atención de Yeosang, debía ocultar de cierta forma la emoción que se sentía al ser la persona que lo enseño a besar. 

bitter sweet | YUNSANGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora