Capítulo 14: Phytor

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Narrador omnisciente:

Los ninjas aterrizaron frente a las puertas de La prisión Kryptarium, conocido como el hogar de lo peor de lo peor en Ninjago.

--- Si alguien quiere saber como combatir con una serpiente, antes debe hablar con una –– comento Wu antes de hacerles señas al guardia de seguridad que estaba en el puesto.

Recorrieron el pasillo para encontrar a la serpiente que buscaban. En el transcurso recibieron una que otra palabra no muy alentadora de los prisioneros del lugar. Siendo la mayoría de los presos que están ahí gracias a los ninjas, es raro encontrar un fan o a alguien que les caiga bien ahí.

Dentro de la "casa" se encontraba una serpiente de escamas blancas con detalles violetas tomando un té mientras hablaba con un pequeño balón, al que le pinto una carita y lo apodo como Rodrigo.

--- Pues sí, Phytor, esta podría ser la mejor taza de té que has hecho –– hablo Phytor, disimulando la voz de la pelota.

--- Me halagas mucho, Rodrigo, pero continua siendo así –– le dio un sorbo a su taza antes de escuchar una voz que se le hacía conocía por detrás suyo.

--- Necesitamos tu ayuda –– pidió la voz, que reconoció como Lloyd.

--- ¿A ustedes? ¿Los ninjas? Dejaron que el devorador me comiera, vencieron a cada ejército en el que me enrole, ¡hasta me obligaron tomar su píldora de encogimiento! –– recordó –– ¿No la han hecho suficiente daño a mi degradado ego?

Todo su cuerpo se movió involuntariamente cuando los ninjas giraron su pequeña casita.

--- Bien jugado –– dijo este, agitado por el bravo movimiento –– Y supongo que esto es por ese insensible varón de los fideos y su gente que ahora son Anacondrais –– ni siquiera los ninjas tuvieron que abrir la boca –– ¡Son impostores! En mi opinión.

--- Tú eres el último Anacondrai que queda, debes de saber como detenerlos –– asumió Jay.

--- No voy a decir otra palaba hasta que averigüen como agrandarme y no me pidan que confié en ninjas –– este se dio la vuelta haciéndose el indignado y con esperanzas de que se fueran.

--- ¿Confiarías en una serpiente?

--- ¿Garma-Condai? Ahora si despertaron mi interés, hagamos un trato, ¿quieren?

Zane abrió un poco más los ojos y salió afuera un momento para hablar con Pixal, la chica que estaba en su mente luego de Zane haya hecho su primer intento de escape, que fracaso.

--- Mantente en guardia, tal vez podrías recibir visitas inesperadas.

Y lo que antes se había convertido en sospecha, se volvió una realidad.

Narra Lloyd:

Garmadon, Wu y yo fuimos los que logramos salir de ese alboroto que se había hecho en el interior de Kryptarium. Creíamos que estábamos muy alejados de todo ese problema, muy equivocados estábamos.

Las naves y Mechs de los Anacondrais nos rodean y nos vemos diminutos a su lado. Sabemos por lo cual ellos viene hasta aquí, por lo tanto, odio decirlo, pero tengo que proteger a Phytor. Si no fuera por la misión, lo más probable es que lo haya dejado morir.

Ellos van bajando de sus vehículos, lo último que se me ocurre hacer, como tengo a Phytor en la palma de mi mano (literalmente), es usar Spinjitzu. Cuando acabe, mire mi mano en la que sostenía a Phytor, no estaba. Debe de ser en la otra, tampoco.

Era broma que te dejaría morir, Phytor.

Su tamaño no me está ayudando en su búsqueda y que me ataquen un remplazo de Anacondrais tampoco es lo más alentador de su parte. Cuando por fin lo encuentro, parpadeo y ya no lo tengo a mi vista, parece que lo hace a propósito.

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