Mi Propósito En La Vida

Capítulo 33: "Llámalo"

VOLVI PERRASS

Narra Hikari:

Después de lo que el señor había mencionado James me hizo volver arriba a ordenar todo el desorden que habíamos hecho. No pude quejarme porque seguía shockeada de que tuviera la habilidad de controlar los espíritus de los muertos.

Pero ¿Cómo nunca supe que lo tenía? ¿Cómo mi mamá nunca me lo dijo? Ahora que se de este secreto, ella nunca lo menciono, ni siquiera lo mostro. Eso dificulta las cosas porque no sé como controlarlo, pero supuestamente yo no tengo el poder, si no el collar, el Señor Oscuro fue quien me lo quito, ¿Cuál es la razón? Nunca lo supe.

No podía aguantar más, así que baje con James y ese señor para buscar más respuestas. Abrí la puerta del ático, mi cuerpo casi cae de culo cuando veo la habitación completamente vacía, la silla donde estaba el señor está repleta de manchas de sangre, el olor a metal y a sangre más la escena del crimen no me permiten quedarme mucho tiempo antes de que me agarre arcadas. El deseo de vomitar surge ni bien sali de ahí.

¿Qué había pasado ahí? O mejor dicho: ¿Qué hizo James con el señor? ¿Dónde están?

En lo que voy subiendo, choco con algo fuerte, mi cabeza se frena por unos segundos antes de levantar la cabeza y ver a la persona que me gustaría evitar ahora mismo: James. Esta sin camisa, con un trapo y un balde de agua con químicos adentro, seguro que es para limpiar toda esa escena.

--- ¿Todo en orden? –– pregunto intentando no mirarlo a sus ojos que me miran con furia.

--- ¿Tienes idea de lo que hiciste?

No me animo a contestarle, no después de ver todas esas manchas y recordar el brazo repleto de sangre y la mano en el piso.

--- Te pudo haber matado. Te dije exactamente que no salgas y saliste. Te dije que no te alejes de la casa, ¡y lo hiciste! ¡importándote una mierda si volverías viva!

Sus regaños no permiten que mi cabeza se eleve para hacerle frente, y pasa lo que no me gustaría mostrar otra vez frente a él; mis ojos se humedecen con facilidad, no puedo hablar porque largaria todas las lágrimas que no merezco largar ahora. Y esa sensación, esas lágrimas, las vengo guardando durante mucho tiempo.

--- ¿Al menos pensaste lo mucho que me preocupe por ti? Cuando no te encontraba por ningún lado, estuve a nada de llamar a gente para que me ayude a encontrarte. Me volví loco como un completo idiota.

El silencio fue mi condena. Mi boca no lograba articular ni siquiera una disculpa que él se merece. Fui una estúpida y él lo sabe, estuve mal haberme escapado sin asumir los riesgos. Sin embargo, mi mente está en blanco, gracias a eso, no puedo ni hablar.

--- A partir de ahora no vas a poder ni siquiera a tomar aire. Si quieres quedarte aquí y vivir antes del que Señor Oscuro te encuentre, quédate y no salgas de la casa. Y créeme, me voy a enterar si llegas a intentarlo.

Dicho eso, se fue hacia el depósito, dejándome completamente libre para llorar.

(...)

Paso alrededor de cuatro o cinco semanas luego de saber que el collar porta mi poder perdido. Para serles honesta, las cosas no están yendo bien. Mi relación con James empeoro, poniéndose todo muy incómodo. No sabemos nada acerca de este poder que ni siquiera tiene nombre. Por último, pero no menos importante, James estuvo empeorando en estas semanas. Me preocupa no saber que le pasa porque cada vez que lo veo parece que va a morir, y sus ojeras lo muestran con mucha claridad. Las pocas veces que he cruzado miradas con él, se me ponía la piel de gallina al ver como sus ojos me transmitían oscuridad y rencor. Pero había algo más, algo se estaba empoderando de él que me asusta. Esta tan cansado, pero él no quiere hablarme aun y lo comprendo, yo tampoco me hablaría sabiendo que casi me matan por una estupidez.