MAZEKEEN
Abro los ojos y parpadeo varias veces hasta que mis ojos se acostumbran a la luz, me levanto de la cama y siento el frío suelo bajo mis pies desnudos.
Oh mierda.
—Deberías decirle a Jay lo de la otra vez— aparece mi hermano
—Primero que todo: buenos días, hermanito. ¿Que tal? Bien bien y ¿tu? Yo perfectamente. ¿Por que no bajas a comer y luego hablamos? Oh no, tranquilo que estoy para ti.— finjo una conversación y veo como sonríe, le extraño tanto...
—Hola, hermanita— rueda los ojos divertido y desearía que estuviera aquí, que no fuera yo la única que lo ve.
—Llamaré a Jay después de ducharme.—
—¿Maya?— pregunta
—¿Que?— preguntó
—Maya vino una noche, y no la has vuelto a ver ¿o si?—
—No, y tampoco me interesa donde esté—
—Maze, era tu mejor amiga. Dale la oportunidad, no seas así, ¿como quieres que Alex te dé una oportunidad si tú no le das es oportunidad al resto?—
—Alex y Maya son completamente temas distintos—
—Lo distinto es: que Mata nos abandonó, pero a Alex fuiste tú la que lo abandonaste—
—Vaya, hermanito, gracias— digo irónicamente
—¿Acaso no deberías tú entenderla? Tú hiciste lo mismo que ella, algo debería de ser igual.—
—No se donde está— me encojo de hombros
—Búscala, en el cementerio—
—Ni siquiera estás enterado ¿Acaso olvidad que te incinere?—
—Pero al principio aceptaste mi entierro—
—Pero recordé que una vez me dijiste, que si algún día morías querías ser incinerado—
—Pues te lo agradezco, pero eso no lo sabe Maya, a demás mi lápida con mi nombre sigue allí—
—La iré a buscar después de hablar con Jay, ahora déjame ir a duchar—
—No te retengo— levanta las manos y rio un poco
—¿Con quien hablas?—pregunta Ryan entrando
—Conmigo misma— digo y vuelvo a mirar donde antes están a mi hermano, pero ya no está. Me levanto para irme a duchar, al salir me coloco una sudadera granate y un jean gris ajustado.
Busco mi móvil y llamo a Jay que me contesta a lis diez segundos. Y viene a los 10 minutos.
Le explico lo que sucedió antes de venir, el dolor desgarrador en mi pecho...
—El vínculo está colgando de un pequeño y fino hilo— responde Jay
—¿Se arreglará?— preguntó con un poco de miedo, no quiero perderlo para siempre, al menos quiero saber que tengo una parte de él conmigo.
—Alex no quiere recuperarlo— dice entre un suspiro— Y si no quiere tal vez ese hilo se rompa y ya el vínculo que no se había visto en años o siglos desparezca—
—¿Y si desparece se puede reconstruir?—
—No lo se, jamas he vivido un caso de estos, no tengo experiencia y no haya ningún libro que diga lo que pasa en un vínculo roto—
—Lo solucionaréis— parece mi hermano tras de Jay me quedo con la vista fija en los ojos de mi hermano.
—¿Está aquí?— pregunta Jay y asiento, luego señaló a mi hermano tras de si.

ESTÁS LEYENDO
Jaque mate cabrón
Roman pour AdolescentsEra una chica normal, estaba en mi primer año de universidad, solo tengo 18 años. Esa noche cambio mi vida, me lo arrebataron todo... por ello me vengaré y juro encontrarte, juro matarte por lo que me has hecho. No pienso tener compasión contigo ca...