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Hyo-ri!
Al llegar al refugio donde estaban todos las personas que sobrevivieron, les dieron sus cosas para que se cambiaran y comieran. A lo lejos Hyo ri la vio sólito sus cosa y se acerco a pasos lento sus lágrimas.
Se veía bien, estaba sana y salva le daba aquella hermosa sonrisa que hyo ri tanto ama. Aquella aura llena de amor y cariño que la rodean.
Era ella, era su amada abuela.
-A-abuela...-tartamudeo hyo ri, con una voz susurrante pero a la vez rota.
Corrió hacia ella con su ojos cristalizados y lágrimas callendo por su rostro.
-Mi niña hermosa, estas viva y a salvo -dijo la abuela al igual que su nieta con lágrimas en los ojos.
Su abuela puso su mano en el rostro de su nieta con aquel amor que tanto le da a Hyo-ri, y limpio sus lágrimas con una cálida sonrisa para luego darle un fuerte y cálido abrazo.
-Si, si abuela, estoy bien. Y tu también lo estas -dijo la chica ya llorando.
-Claro que si mi niña, no podría dejarte sola aquí -respondí se abuela.
-Pero Nam ra no logro venir, aquí conmigo abuela -sollozo.
-Mi niña, ella va a seguir con nostras aun que no de forma física -acarició su cabello con lágrimas en sus ojos.
A su abuela también le dolió saber que nam ra ya estaba con ella ahí en ese momento.
Los chicos veían la escena con melancolía y nostalgia recordando a sus familias, hyo ri logró su objetivo qué era encontratar a su abuela sana y salvo. Era lo que más deseaba en el mundo después de todo, pero aún así sentía ese vacío que dejó Nam ra en su corazón.
