[EXTRA II]

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JiMin no pudo evitarlo. Ni siquiera intentó disimular un poco su mal humor mientras veía hacia la mesa en donde estaba aquella omega que no dejaba de ver a YoonGi.

Llámenlo paranoico, estresado, o un poco agotado por el embarazo, pero el interés en el rostro de la omega, lo estaba haciendo perder la paciencia.

Estaba a un segundo de darle cacería, porque la había reconocido como una presa, quizás una cambia-formas roedor, poco le importaba la casta, estaba empeñado en desaparecerla de su vista.

Su boa estaba ansiosa e irritada.

—Dice mi mamá que es normal que se te despierten los instintos primitivos de tu animal interno. —JiMin asintió mientras YoonGi leía con interés el mensaje que su mamá le había mandado. —¿Deberíamos ir a un campo para que puedas cambiar a tu forma ahora que aún puedes?

—Voy a asesinarla. —Siseó por lo bajo, sus grises ojos brillando de una forma amenazante. YoonGi frunció el ceño.

—¿A mi mamá? —Indagó YoonGi entre confundido y preocupado.

Pero cuando JiMin iba a responder. La omega hizo algo que nunca esperó.

Decidió acercarse.

—¿YoonGi-oppa? —Preguntó con un timbre irritante y chillón para oídos de JiMin. El alfa volteó a verle y un pequeño reflejo de sorpresa adornó su rostro.

JiMin sonrió tratando de ser lo más amable e hipócrita posible.

—Nayeon-ssi, es bueno verte. —La omega batió las pestañas de forma exagerada y JiMin quiso gruñirle. —Te presento a mi omega. —Señaló YoonGi mientras tomaba la mano de JiMin. El encanto en la mirada de la omega murió por completo.

—Uh ya, con razón me siento en peligro, un omega de boa, tan raro. —Expresó valientemente ignorando el temblor de su animal interno.

—Su omega y padre de sus cachorros. —Sonrió falsamente amable cuando vio la mueca en el rostro de la castaña. —Siento a tu conejito temblar de miedo y mi boa está luchando por salir, ya lo saludaste, puedes irte.

Nayeon observó entre YoonGi y JiMin. El alfa se encogió de hombros.

—Saludos a tus padres, nos vemos luego. —Cortó YoonGi mientras miraba a JiMin. —Tengo que encargarme de mi omega.

Y Nayeon entendió claramente cuando notó la mirada del alfa hacia el chico frente a él.

Estaba completamente enamorado del omega siniestro.

YoonGi no pudo evitar reírse mientras veía a JiMin a un lado suyo dentro del carro. El omega estaba enfurruñado de una forma que hacía que su tigre quisiera recostarse a su lado y cubrirlo con su aroma.

Podía estar terriblemente molesto, pero a YoonGi le parecía tierno y encantador.

—¿Quién era ella? —Preguntó en un susurro. YoonGi soltó un suspiro largo y dramático.

—Fue mi compañera en algunos celos. —JiMin se mantuvo en silencio. —Nunca intentamos nada serio, no éramos compatibles para algo más que no fuera el sexo.

—Pero ella claramente está interesada en ti. —Bufó el omega. YoonGi se encogió de hombros mientras detenía el carro en una zona menos transitada y volteaba a ver al menor.

—Sip, es evidente. —La forma tan sincera del pálido al decir aquello hizo al omega enmudecer. —El problema para ella, es que estoy enamorado de un omega precioso, que tiene mi marca en su cuello y mi cachorro en su vientre, creo que en la balanza, no queda ella en una posición justa. —Susurró en el oído del omega. —Y si me lo permite, estaría dispuesto a saltarme algunas cuantas leyes solo para tenerlo feliz y satisfecho. —JiMin sonrió divertido. Sus ojos grises siendo lo suficientemente brillosos para cautivar y hechizar al mayor.

—Tentador. —Susurró tomando el rostro del pálido y empezando un beso brusco y necesitado.

No había tiempo para pensar en los detalles.

Instinto. Estaba siendo dominado por sus instintos. Apenas tenía un mes de gestación y podía decir que vivía a la expectativa de lo que su animal interno quería hacer.

¿Comer vegetales? JiMin se los comía.

¿Ver anime y llorar por la misma escena de siempre? También lo hacía.

¿Atacar a su alfa con imágenes subidas de tono solo porque quería que este le mandara audios calientes? Excelente misión.

¿Emboscar a YoonGi en la habitación para terminar con su alfa en lo más profundo de su ser? Divertido.

¿Ir a cazar con su mamá? Pan comido.

¿Asustar a JungKook y luego fingir que le dolía su rechazo? Aprobado.

¿Quitarse el cinturón de seguridad, hacerse un espacio entre el puesto de conductor y montar a su alfa en plena vía pública? ¡Pan comido!  

Sus vidas no habían cambiado ni un poquito. Desde correr en las mañanas al baño para vomitar posiblemente su cena. Seducir a YoonGi y comer por quince personas, todo seguía igual.

—¿Este era tu plan? —Susurró el omega mientras terminaba de acostumbrarse a la sensación de tener a YoonGi dentro de él? La posición era un tanto incómoda, pero ya había empezado, por lo mínimo, tenía que concluir su osada acción.

YoonGi soltó un gemido bajo mientras colocaba su mano en la cintura del omega.

—Sip, bueno, cuando estás celoso, eres más receptivo a mi, debía aprovechar. —Susurró cerrando los ojos cuando sintió el lento vaivén que JiMin estaba iniciando. —Y además, me gusta cuando haces todo el trabajo y yo solo me siento. —JiMin rió mientras tomaba un ritmo más rápido y se deleitaba con la imagen del alfa bajo él.

Ya sabían todo del otro, la forma en la que se movían, incluso como reaccionaban al toque del contrario, pero JiMin siempre lo sentía especial, lo sentía correcto.

Su animal interno se derretía con solo sentir al alfa sobre él. Con poder sentir sus caricias en su cuerpo mientras se escondía en su cuello y tanteaba la zona donde se encontraba su marca.

—A-Así bebé. —Susurró el alfa mientras sus manos se encargaban de darle atención al erecto miembro del menor. —Muévete más para hyung. —Jadeó bombeando con la misma fuerza que JiMin se movía sobre su eje.

—¿Así? —Susurró dulcemente, saliéndose solo un poco antes de volver a descender con fuerza sobre él. YoonGi jadeó con fuerza, sintiendo la presencia de su ya venidero orgasmo y la forma en la cual el interior del omega se preparaba para recibir el nudo del alfa.

—Te amo. —Susurró el alfa antes de enterrar sus colmillos en el cuello del omega, justo en el momento en que JiMin gritó su orgasmo, hundiendo sus uñas en los hombros del pálido.

—¿Cuándo lleguemos a la casa lo repetimos en la cama? —YoonGi rió divertido mientras veía alrededor. El auto olía a sexo y sudor. Pero JiMin estaba contento y YoonGi estaba orgulloso de haber calmado la molestia del omega.

—Mamá también dijo que tu apetito sexual también aumentaría. —JiMin asintió moviéndose lentamente sobre el alfa. YoonGi se tensó ante la mirada penetrante del omega.

—Suerte que tengo que mi alfa sea tan caliente como yo. —Susurró con una voz grave y profunda. YoonGi asintió dándole la razón.

Venían días muy productivos.

Hola. 💕

Nadie se esperaba esto, ni yo. Inicié con la idea de escribir US y terminé escribieron un extra de Rare.

Si llegaste hasta aquí hoy, gracias por leer.

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Rare » Omegaverse Yoonmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora