Capítulo 14

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Manigoldo salió del despacho de Sage estaba maldiciendo su suerte ya que le habían dicho que Albafica estuvo en el país internado en un hospital, pero pocos días después de que Arnold habló con el Albafica escapó del hospital y no pudieron encontrar su rastro.

Manigoldo solo estaba caminando en círculo pensando en una manera de reencontrarse con Albafica, pero en medio de su caminata terminó chocando con alguien Manigoldo estaba por reclamar, pero se encontró con Aspros, Manigoldo estaba impresionado pues no pensaba que volvería tan pronto.

-eres realmente difícil de localizar, sabias-dijo Aspros con las manos en la cintura-tengo algo muy importante que decirte.

Manigoldo y Aspros fueron aun lugar más apartado para poder tener más privacidad, después Aspros comenzó a contarle sobre la situación actual en el bando enemigo, pero lo que más le interesó fue la reciente deserción de Albafica y realmente eso mejoró sus posibilidades de poder encontrarlo y hablar con él.

-no te emociones tanto-dijo Aspros borrando la sonrisa de Manigoldo-por haya no toleran a los que traicionan al ejército, y realmente no me extraña que mandara a una persona a matarlo.

-debo ir a buscarlo-estaba por irse, pero fue detenido por Aspros.

-no sabes en dónde está, después de que desapareció no pudo seguirle el rastro, será como buscar una aguja en un pajar-cruzándose de brazos-además que te garantiza que aún sigue con vida.

-de igual modo tengo que tratar-apretando el collar alrededor de su cuello-si al menos puedo verlo una vez más así podre cerrar este capítulo de mi vida.

Manigoldo se alejó de Aspros y fue directo a su habitación para poder empacar algunas cosas aunque lo más difícil será convencer a Sage de que lo dejara ir a buscar a Albafica, Manigoldo termino de empacar y después se dirigió al despacho de Sage.

-puedo ayudarte Manigoldo-dijo mirando al peli azul entrar.

-necesito pedirle un favor-dijo parándose derecho.

-¿De qué se trata?-preguntó curioso.

Manigoldo dio un fuerte suspiro y comenzó a contarle a Sage lo que había estado haciendo desde que se encontró con Albafica aquella vez en el bosque, Sage estaba furioso ya que por su imprudencia casi arruina una operación que podría hacerles perder la guerra, pero al mismo tiempo se mostró comprensivo ya que conocía bien los sentimientos que Manigoldo sentía hacia Albafica.

Manigoldo también mencionó lo que le había dicho Aspros algo que llamó la atención de Sage ya que por un lado Albafica podría tener valió información que les diera la ventaja, lo medito un poco para después mirar a Manigoldo.

-está bien-dijo dándole una sonrisa a Manigoldo-puedes llevarte a un compañero.

-gracias-dijo caminando hacia la puerta.

-y Manigoldo-dijo deteniéndolo-vuelvan los dos con vida.

Manigoldo solo asiente y sale del despacho volvió a su habitación y tomo su mochila y después salió del cuartel y tomo un auto, pero antes de que este pudiera irse se encontró con Kardia y Aspros esperándolo en la salida.

-¿Que están haciendo aquí?-preguntó asomándose por la ventana.

-pensante que dejaríamos que hicieras esto solo-dijo Kardia con una sonrisa.

-Kardia estas herido-dijo mirando los vendajes.

-ya me siento mejor-guiñando el ojo-además si no voy contigo seguro morirás, alguien debe cuidarte la espalda.

-como quieras-sonriendo y mirando a Aspros.

-todos saben que ustedes no puedes estar solo en un solo lugar-desviando la mirada-causan desastre por donde quiera que van.

Susurros en el jardínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora