Capítulo 8

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Después de varias horas de espera los doctores ya habían terminado de tratar las heridas de Albafica y trasladaron a Albafica a otra habitación mientras que otro fue con Arnold para informarle sobre el estado del peli celeste.

-se recuperara-dijo el doctor-solo necesita descansar y tener mucho cuidado.

-gracias doctor-dijo Arnold estrechando la mano con el doctor-sabe si está despierto.

-aun esta sedado, pero puede pasar a verlo.

El doctor guio a Arnold a la habitación en donde estaba Albafica, el doctor se fue dejándolo solo y cuando Arnold se acercó a la cama Albafica se encontraba con varias vías intravenosas y una mascarilla que lo ayudaba a respirar.

Arnold solo sentó al lado de la cama esperando a que Albafica despierte, no había notifica a Sage sobre Albafica y le había prohibido a los soldados que lo encontraron que lo comentaran ya que cuando estaba con Manigoldo pudo notar como el no dejaba de ver a Albafica asique rápidamente llegó a la conclusión de que los dos de alguna manera tienen un conexión cercana.

Por otro lado los ataques del enemigo continuaron y obviamente Sage mando a contra atacar y con esta nueva orden Kardia tenía dificultades ya que aún trataba de descubrir más sobre Minos y Albafica, pero no podía negarse a las órdenes del comandante asique se fue dejándole el trabajo a Degel.

Los aviones sobrevolaron en campo de batalla tirando sus bombas, los tanques abrieron paso para que los soldados dispararán contra el enemigo Kardia se abrió paso entre ellos matando a los que veía, pero en eso una fuerte explosión termino por separarlo del grupo.

-esto es malo-dijo Kardia mientras usaba un pañuelo para cubrir una herida.

Kardia se levantó y camino entre el humo y el polvo tratando de localizar a sus compañeros, pero en eso Minos apareció y lo apunto con su arma Kardia maldijo si suerte y se preparó para tomar su arma.

-salúdame a Manigoldo-sonriendo.

Se escuchó un sonoro disparo que llamo la atención de los compañeros de Kardia, cuando llegaron al lugar encontraron a Kardia tendido en el suelo y herido de muerte.

-traigan una camilla de prisa-dijo uno de los soldados-los demás cúbrannos.

Los soldados subieron a Kardia a una camilla y lo llevaron hasta el campamento para atenderlo y poder salvarle la vida, Shun comenzó a atender a Kardia.

-estará bien-preguntó unos de los soldados.

-solo el tiempo lo diré, la bala pudo perforan un órgano vital-dijo Shun-tenemos muchos heridos-caminado hacia un soldado-llama aún helicóptero tenemos que llevar a los heridos de gravedad al hospital.

El soldado asintió mientras que Shun estabiliza a Kardia para que pueda resistir el viaje, pero lo que más extrañaba a Shun es que el enemigo no mató a Kardia y en su lugar solo le dejó herido de muerte.

El helicóptero llegó y rápidamente subieron a Kardia junto con otros soldados y los llevaron al hospital, Degel recibió la noticia y corrió al hospital para ver a Kardia, pero como Kardia está siendo atendido solo pudo sentarse en la sala de espera.

En otro lugar Albafica ya estaba despertando y se sobresaltó cuando vio a Arnold sentado a su lado trato de levantarse, pero el dolor lo obligó a acostarse de nuevo Arnold lo calma y después fue a llamar al doctor, cuando el doctor terminó de revisar a Albafica, Arnold volvió a sentarse y mirarlo fijamente.

-¿Cómo terminaste en el río?-preguntó, pero Albafica solo desvió la mirada-no quieres contestar-suspirando-aun no encontramos a Manigoldo.

Albafica se estremeció después de escuchar ese nombre rápidamente volteo hacia Arnold esperan que solos sea una mentira, pero la verdad se podía ver en sus ojos Albafica solo miro el techo conmocionado.

Susurros en el jardínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora