Capítulo 16

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Albafica estaba dormido profundamente en el asiento trasero junto con Manigoldo, después de haber escapado de Minos estuvieron horas en la carretera una vez que llegaron a su territorio estarían fuera de peligro.

-Manigoldo-dijo Kardia volteando hacia su amigo-crees en serio que Albafica estará bien, te recuerdo que él es un soldado enemigo.

-el viejo me dio su palabra que no le tocaran un pelo-dijo sobando los cabellos de Albafica-y si lo hacen yo mismo los mato.

-realmente lo amas, no-dijo Aspros mirando a Manigoldo por el retrovisor.

-desde que éramos niños-pegando más a Albafica.

Cuando llegaron Manigoldo llevó a Albafica con Sage, Albafica se sintió incómodo ya que llamó la atención de varios soldados, Albafica se sorprendió por lo amable que resultó ser Sage a pesar de ser un general.

-Manigoldo se encargara de ti-dijo Sage sentándose en su escritorio-espero que nos puedas ayudar en esta guerra.

Albafica solo bajó la cabeza y fue guiado afuera del despacho por Manigoldo, Manigoldo pudo sentir la incomodidad que sentía Albafica y de cómo sus compañeros lo miraban y los juzgaba, Manigoldo solo les dio una mirada severa para que dejaran en paz a Albafica.

-escucha-tomando la mano de Albafica-sé que perdiste la memoria y no recuerdas nada, así que me gustaría que dejarás que te muestre quién eras antes del accidente.

-desde que era niño siempre tuve curiosidad de quien era o quienes eran mis padres-abrazándose a sí mismo-pero ahora no estoy tan seguro.

-no te obligare-negando con la cabeza-es decisión tuya.

Albafica lo medito por unos minutos, pero al final termino aceptando pues esta tal vez sería su única oportunidad de saber sobre su pasado, Manigoldo llevo a Albafica a la casa de Ilias en donde ya lo estaba esperando Luco y este se encontraba ansioso pues no sabía qué clase de reacción tendrá Albafica al verlo.

Cuando los dos llegaron Ilias rápidamente abrazó a Albafica y este solo salto sorprendido y abrumado, Manigoldo los separó y calmó a Albafica, Luco se acercó a ellos lentamente y tomo la mejilla de Albafica para poder verlo a los ojos.

-me recuerdas Albafica-dijo esperanzado.

-no-dijo bajando la cabeza.

-bueno eso no importa-dijo para después abrazarlo-me alegra volver a verte, mi nombre es Luco y soy tu tío.

-¿Dónde están mis padres?-pregunto nervioso.

Luco quedó en silencio realmente no sabía cómo decirle que su padre había muerto hace años, aunque a Albafica solo le basto la mirada de Luco para darse cuenta.

-entiendo-dijo bajando la cabeza.

Ilias se acercó a Albafica y le dio un fuerte abrazo, pensando que si lo soltaba nuevamente de lo llevarían, pero el momento se vio interrumpido cuando fuertes estruendos se escucharon afuera de la casa junto con el grito de la gente.

Manigoldo salió de la casa y vio los tanques del enemigo disparando y derribando casas mientras que los soldados disparaban a las personas y tomaban como prisioneros a unas.

-¿Cómo fue que pasaron la frontera?-dijo para después volver a la casa-tenemos que salir.

Manigoldo tomo un arma y aseguro la puerta, Sísifo tomo a Regulus quien tomo a Max y de fueron al sótano, Albafica miro por la ventana y vio que al frente de la fila estaba Minos con su tétrica sonrisa.

-Albafica vete-dijo Manigoldo empujándolo a los brazos de Ilias.

-no te dejare-dijo para después zafarse y tomar las manos de Manigoldo-Minos está aquí por mí.

Susurros en el jardínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora