Capitulo VIII. Mañanita. Pt 1

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Advertencia: 

- Este capitulo tiene sexo explicito hombre/hombre, dicha parte escrita en cursiva, además de una mención de una persona encuerada saliendo a la calle y menciones de uso de alcohol :1. 

- Los lugares mencionados en este fic son parodias burdas de la zona donde esta, las ciudades que se mencionan aquí no son poblados reales de Veracruz, México.  

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Goldheart, uno de los héroes más populares de todos, de quien decían hacía sentir segura a la ciudadanía con su sola presencia... se estaba levantando aturdido, con sensación de que la poca luz que entraba al cuarto le estaba quemando los ojos, y lo peor, desnudo. Su largo cabello castaño estaba suelto y enmarañado, y la boca le sabía a vómito.

Todo le daba vueltas, le volvieron a llegar las náuseas, y tratar de recordar qué le había pasado solo hacía que le entrara una jaqueca.

A juzgar por el asunto tenía resaca, una como no la había tenido desde aquella única vez en la universidad, y no se acordaba para nada de cómo la adquirió. Toda la "película" de recuerdos de las últimas 48 horas estaba completamente borrada de su cerebro. Lo último que recordaba era haberse tomado un café en su casa y una llamada de Carmencita para que fuera a la oficina. ¿Fue a una fiesta? ¿Con quién fue? ¿Cómo demonios había llegado hasta ese punto?

Recobrando entonces la conciencia, busco algo a sus alrededores para entender que paso, y de poco en poco se sintió más horrorizado.

Número uno, no estaba en su casa. Se encontraba en una cama de madera dentro de una cabaña, con un calentón eléctrico cerca de la pared ayudando a mantener la temperatura, y la cortina de la ventana cerrada. Número dos, ninguna de sus prendas estaba a la vista. Era como si su ropa hubiese desaparecido junto con las memorias de qué demonios hizo. Número tres, el canto de las gaviotas y el sonido del oleaje afuera le decían que ni siquiera estaba en su ciudad. Y número cuatro, por los paquetes de condones abiertos en la mesita de noche junto a la lámpara, el dolor intenso que de repente le llegó al coxis, y la sensación de que anduvo despierto hasta más allá de la media noche, era probable que hubiera tenido relaciones sexuales con un completo extraño.

Ahora sí, ¿qué carajo pasó ayer?

- *Bostezo* Wey... no muevas tanto la cama... - dijo alguien justo al lado del héroe.

Metido entre las sábanas se encontraba un hombre joven de pelo blanco con un peinado mohicano, sin orejas, ojos negros y con una nariz puntiaguda. Goldheart pelo los ojos.

- ¡¿Qué verga?!

- Oye Donny, no grites, hay gente todavía dormida en la pinche casa.

Goldheart se percató que se encontraba en un chal pequeño que seguramente estaba cerca de la playa por el olor de la brisa marina.

Al final eso no era lo importante. Lo importante es que conocía a este sujeto. Se trataba del ladrón de joyas y comerciante del mercado negro, Dark Phantom, fugitivo marcado en los archivos de P.E.A.C.E desde hacia algunos años, sobre todo porque este chico era el sucesor del "negocio" de su padre. Más porque desde hacía un año y fracción que se movía él solo por los rubros del crimen organizado, y también el no tan organizado, sin la ayuda de su viejo.

Pero en medio había una pregunta en el aire. ¿Por qué este tipo lo estaba llamando Donny?

- Ehi, Donny, ¿estas bien? Te veo ido.

- Pero quien es Don...

Goldheart no pudo terminar la frase porque las náuseas volvieron junto con la foto sensibilidad. Tenía tantas ganas de vomitar.

Los chicos del coro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora