12. LA REINA DEL VENENO

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- ¿Pero por qué a las Filipinas?

- Ya te lo he dicho Hiro, te enseñaré conforme esté en mis posibilidades magia, pero yo soy un hechicero y tu una bruja, necesitas que te instruyan correctamente en brujería para lograr el máximo potencial de tu magia.

- Pero ni si quiera tengo magia aún. Y eso no explica por qué a las Filipinas - Akko estaba molesta ya que cuando por fin había llegado el periodo de descanso en Appleton tras los exámenes no había podido planear nada aún cuando su profesor la estaba mandando fuera del país.

- Precisamente porque aún no tienes magia es que estamos haciendo esto y tienes que ir a las Filipinas por que fue la condición que me puso Susan Manbavaran para ser tu maestra de brujería.

- ¿Y no podemos pedirle a otra bruja?... No se, ¿algo más local?

- La reina del veneno es una de las mejores brujas vivas que hay y la única con la que tengo contacto. Ahora que si lo prefieres, le puedo pedir a Lord Hanbridge que le pida a la familia Cavendish que te enseñen.

- Entonces... ¿cuándo nos vamos a las Filipinas?

- Yo no iré contigo, mi aprendiz te acompañará como guardaespaldas. Alice... - Dando un paso hacia un costado, Renfred dejó ver a una chica rubia, la cual inmediatamente se puso de pie para ponerse a un costado de su maestro.

- Alice Swayne, un placer.

- Hiroshi... es decir, Atsuko Kagari, pero puede llamarme Akko.

- La señorita Kagari debe ser llamada por su nombre masculino mientras estemos en Blytonbury, pero una vez dejen el lugar, puedes llamarla por su nombre verdadero.

- Entiendo, Hiro... entonces ¿cuándo nos vamos?

- Saldrán esta noche para llegar allá a primera hora de la mañana, toma. - Renfred le extendió unos cuantos frascos a Alice. - Estos tienen las coordenadas del lugar al que van y estos las de la mansión, para que puedan volver.

- Entendido. - Respondió la rubia

- ¿Qué son esos?... No entiendo de lo que hablan, ¿nos iremos esta noche? ¿llegaremos por la mañana? ¿hay aviones tan rápidos?

- Estos frascos liberan un hechizo de mi invención basándome tanto en el uso de líneas ley como en mi observación de diferentes magos y hadas durante sus teletransportes. En resumen es un hechizo de teletransporte para nosotros los hechiceros.

- Pero yo soy una bruja.

- El hechizo no se limita a transportar hechiceros. Simplemente que ustedes magos, brujas y hadas tienen acceso al teletransporte mientras que los hechiceros no poseíamos tal habilidad. Sigue teniendo sus limitantes todavía, ya que es necesario haber estado en el lugar de destino de antemano, pero no lo he podido desarrollar mas.

- ¿Y porque nunca me enseñó este hechizo?

- Aprende brujería y no necesitarás de un hechizo incompleto como el mío. Podrás viajar a través de las líneas ley o hacer contratos con las hadas y usar su poder para teletransportarte.

- Pero su hechizo suena interesante, yo quería aprenderlo... además ¿cómo es que está dentro de un frasco?

- Bien, te lo mostraré una vez que vuelvan. Da lo mejor de ti, no dejes pasar esta oportunidad. Olvida las palabras de Arcturus o el destino de la magia. Concéntrate en recuperar lo que te han robado y en ser la bruja que deseas ser. Te aseguro que el resto irá sucediendo a su debido tiempo. Ten paciencia.

- ¡Gracias profesor! Iré a preparar mi maleta y a despedirme de Andrew y papá. ¡Nos vemos en un rato más Alice! - Akko se despidió mientras salía corriendo en dirección a las escaleras.

LA BRUJA DE APPLETONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora