Empiezo a sentir la necesidad de aumentar la intensidad del beso, doy una mordida leve en su labio inferior provocando un gemido suave en Nick, mi ahora novio, sus manos empiezan a sudar pero no para de acariciar mi cintura, mi respiración se siente pesada, anhelo su tacto en otra zona de mi cuerpo, deseo que sus calientes manos vaguen por mis caderas; tomo sus manos obligándolo a que las baje me detengo cuando veo que sus manos aleja con brusquedad y se aleja dándome la espalda.
Quedo desconcertada ante su reacción, me acerco dejando una distancia prudente.
- ¿Pasa algo?
Voltea con suavidad y la mirada fija en mis ojos
- No quiero esto Daylie, no quiero que sea así.
Sin bajar la mirada me acerco una vez más cerca.
-Oye, te entiendo, vamos a tu paso.
Mi voz suena más dulce y suave de lo normal, no sé que me está pasando, realmente Nick me cambia.
- Te quiero Daylie.
Besa mi frente.
-No quiero apresurarme, tenemos mucho tiempo para tener intimidad y yo quiero disfrutar de tu compañía ¿Te parece si vemos una peli y nos comemos todo eso?
Dice mientras me tiene en sus brazos y señala las golosinas.
- Me parece que debemos de ver la saga de Harry Potter completa.
Levanta su ceja derecha y frunce el cejo.
- ¿Tú vez esa porquería? eso no merece ser visto.
No puede ser, me he metido con un hombre sin cultura general, su respuesta me indigna.
- Que mal gusto tienes, en excepción de mi, si no te gusta Harry Potter no sé que te podría gustar.
Suelta una pequeña risa besando de nuevo mi frente.
- ¿Nos vemos las películas de barbie? A mí me gustan, y es mejor que esos hechizos y brujos.
Soy consciente que mis ojos brillan, amo las películas de barbie y me toma de sorpresa que a Nick le gusten, sencillamente éste hombre me sorprende más cada día. Pasaré por alto el comentario sobre la saga de Harry Potter.
-¿Quién pensaría que te gusta barbie? Tú que te ves tan indomable y lejos de esos gustos, primero me llegas con la sorpresa de la habitación y luego esto.
-Lo sé, tengo muchas sorpresas, recuerda que no todo es lo que aparenta, las apariencias engañan, los libros no se juzgan por su portada. Algún día sabrás que no soy nada de lo que estas viendo ahora y lo sé si me amarás o me odiarás por completo.
-Espero poder amarlo entonces, pero y si descubres que yo tampoco soy lo que ves ¿Me amarías o me odiarías?
Su rostro es lleno de confusión, me extraña que él siendo tan inteligente no entienda algo tan simple.
-¿A qué te refieres con que no eres lo que me has mostrado éste tiempo?
-Digo, puede que te esté mostrando una personalidad muy diferente a lo que soy realmente.
-Yo veo transparencia en tu ser y sé que no me mientes con lo que sientes, se te nota a leguas que te encanto, a demás si eres mi novia es porque de seguro serás mi mujer y te prometeré amor eterno frente a un altar.
-Ay, pero que cursi eres, quiero a mi Nick de vuelta.
Se ríe mientras jala mi torso contra el suyo.