I'm not her [Drakey/omegaverse]

『XV』

Debo estudiar para mis exámenes, so la próxima semana no hay capítulo uvu mientras tanto disfruten este capítulo un poco más largo de lo normal.

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【Octubre 12, 2009】

Fue a ese lugar sin pensarlo mucho, solo sintió la necesidad de ir. La noche había caído y luego de estar bastante tiempo en el cementerio condujo su motocicleta hasta ese local. Casi había pasado una semana y simplemente no podía seguir como si nada pasara, sabía muy bien que era un cobarde, evitaba todo porque tenía miedo y se encerraba en lo que era mejor para su tranquilidad; pero en algún momento mientras hablaba con su hermana pensó que debía ir y enfrentar las cosas de una vez. Ingresó lentamente, que se decidiera a actuar no quitaba que estuviera temblando como un chihuahua, una de las prostitutas lo vi ingresar y no dudó ni un segundo en acercarse.

—Mikey, hace semanas que no te veíamos por aquí. —le saludó alegre, el rubio la saludo de igual manera y estuvieron conversando durante un breve periodo, estar ahí solo lo ponía más nervioso. — ¿Estás buscando a Kenny?

—Sí, ¿está? —apretó los puños que tenía ocultos en su chaqueta, nervioso por lo que pudiera pasar.

—No, hoy trabajó, pero volverá dentro de poco, debería estar en su camino a casa. Puedes esperarlo en su habitación si gustas. —asintió, todas las chicas que trabajaban en el burdel siempre lo habían tratado bien, pero se preguntaba si sabían algo de lo que había pasado. Nadie le mencionó nada, pero realmente le costaba creer que Draken mantendría el secreto de su hija a las personas que lo criaron desde pequeño.

Subió hasta la habitación del alfa, ingresó con cuidado y, efectivamente, no estaba ahí. Cerró la puerta detrás de sí, encendió la luz y se adentró un poco hasta sentarse en su cama. Antes pasaba ahí bastante tiempo, pero su olor se había ido y solo se encontraba el del más alto. Pasó algunos minutos pensando en qué debería decir, por donde comenzar, si estaría bien decirle absolutamente todo o si era mejor guardarse algunas cosas. Quería que todo quedara claro, pero no sabía cómo saldría todo. Su cuerpo no dejaba de temblar y algunos malos pensamientos invadían su mente; ¿y si no quería escucharlo? ¿Y si pasaba lo mismo que en el hospital y terminaban gritándose? ¿Y si el alfa realmente se quedaba a su hija y no la permitía verla? Quería irse de ahí, fue mala idea ir. Estaba dispuesto a ponerse de pie para irse cuando la puerta fue abierta.

— ¿Qué haces aquí? —cuestionó el alfa mientras ingresaba a su habitación, no sabía si era correcto acercarse o no, por lo que se quedó en la puerta. Recostando su espalda contra la madera observó al omega con cuidado, percibió su olor desde unos cuantos metros antes de ingresar a su habitación, sus feromonas eran suaves como si estuvieran cargadas de sentimientos.

— ¿Podemos hablar? —giró su cabeza y trató de verlo a los ojos solo para encontrar un rostro de sorpresa, pero este terminó por asentir. Se acomodó un poco en la cama para darle espacio al alfa, este se sentó a su lado. —No estoy muy seguro de por dónde debería empezar... —debían hablar de bastantes cosas, pero no estaba seguro de qué quería saber el alfa.

— ¿Puedo preguntar lo que quiero saber y me lo respondes? —el omega asintió. — ¿Por qué decidiste ocultar todo? —era el motivo por el que comenzó todo.

—Porque tuve miedo. —aún lo tenía. —Yo continúo culpándome por la muerte de Emma. Realmente tenía la idea que ella tendría un futuro brillante a tu lado, pero yo se lo arrebaté. No quiero tomar las cosas que le correspondían a ella. Una familia, felicidad, un futuro a tu lado; todo eso ella lo hubiera tenido de no ser porque la descuidé ese día. No sé porque decidiste tener sexo conmigo durante mi celo, sé que puedo ser muy insistente cuando entro en calor, pero tú solías resistir bastante bien las feromonas de los omegas que entran en celo. —lo sabía porque estuvo durante algunos celos de Emma y Chifuyu, incluso de algunos compañeros de clases. —Cuando me di cuenta del embarazo me dio miedo al ver que toda mi vida se derrumbaba, realmente no lo tomé bien y no aborté solo porque al ser omega hay una gran posibilidad de morir durante el proceso, porque yo realmente no la quería. Yo no quiero tomar lo que a Emma en vida le correspondía, yo solo quería una vida tranquila a tu lado como amigos, pero en ese momento vi mi embarazo como un impedimento y algo que podría obligarme a tomar la vida de Emma y no lo merezco. Lo primero en lo que pensé fue en ocultar mi estado, que tú ni nadie supiera nada y darla en adopción en cuanto naciera, pero Mitsuya descubrió todo y las cosas solo se complicaron a pesar que por un tiempo me ayudó a mantener todo en secreto. —no se animaba a ver al más alto a los ojos. —Yo soy consciente de que tú me hubieras apoyado en todo, pero no lo quería. No quería una familia, no te quería como pareja, no quería ser feliz; solo quería la posibilidad de continuar actuando como si nada hubiera pasado entre nosotros ese día.