La mujer desnuda contemplaba con una sabiduría el atardecer
más allá del mediterráneo. Sus dedos suaves tocaron la arena a sus costados,
la brisa salada le acarició envuelto en secreto el estático cabello,
el sol, su manto caído del cielo.
Sentada ahí recordó su primer y último amor,
con sonrisa tierna y una lágrima burbujeando en el interior,
no pudo cerrar sus ojos, todo le comenzó a estrujar de nuevo
el fantasma, el cráter que tenía por corazón, su canto triste asustó al Audouin,
quién emprendió el vuelo muy lejos de ahí.
Las estrellas pequeñas brotaron, eran las únicas que la consolaron.
Ella, piel de mármol, seguiría en el mismo lugar hasta que la mano que la esculpió,
volviera a terminar lo que hace años empezó,
la mujer de piedra que abandonó.
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Retazos de Melancolía
PoesiaCien poemas que se escribieron en pandemia y que no necesariamente hablan de eso. Retazos de melancolía, 2020-2022. © Queda prohibida la reproducción total o parcial de este material por cualquier medio sin el previo y expreso consentimiento por es...
