capítulo 40 - debe haber otro.

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"Llora, llora, llora porque sé que te extraño y sé que también necesito aceptar que la vida es así y aunque no lo diga, aunque no lo explique, solo estoy luchando contra los fantasmas que me debilitan".

Alicia, al llegar a su oficina y sentarse en su silla, recibió una llamada de Fedora que estaba ansiosa por saber qué había decidido.

Entonces, ¿cuál fue tu respuesta? - ansioso

Alicia - acepto - suspiros - me voy a Africa contigo

Fedora -Eso es demasiado- se rio- que decir se que estas triste por....

Alicia - No importa, la verdad no se como tienes el coraje de dejar a Fernando el hombre que amas y te quiere de vuelta - Pone los ojos en blanco

Fedora - No lo voy a dejar, sigamos juntos, después de todo él no quiere ir, lo invité y se rindió. - Dice indignada. Si me ama, me esperará y mi salario aumentará - risita. - ¿Vas a despedirte de él?

Alícia - No sé, estoy pensando.

Fedora - Así que decídete pronto porque viajaremos pasado mañana.

alicia- si

{...}

al dia siguiente alicia Alicia fue temprano a la empresa, firmó el contrato y se fue directamente a su casa a hacer las maletas. Finalmente recibió una llamada de Fedora pidiéndole que bebiera, fue un adiós y se quedó pensando. A las siete de la noche decidió irse, se arregló y estaba a punto de irse cuando Martin invadió sus pensamientos.

Quería despedirse en persona pero sabía que sería peor, que la lástima que sentía no haría más que aumentar cuando mira al hombre que ama y ve que no haría nada para que ella no se fuera, como ella lo había hecho. creía que Martin ya había tomado la decisión de ella y que Alicia no era parte de ella, así que antes de irse a la fiesta Alicia lo llamó a pesar de que sabía que él no contestaría, porque lo que ella quería y se despidió de ella en el buzón de voz. y eso es lo que ella hizo. Después de unos minutos de mensaje, Alicia tomó su bolso y se fue, se iba a divertir esa noche y no piensa en Martín.

{...}

Era casi media noche porque cuando estaba aburrido Martin tomó su celular para ver las noticias en Internet, cuando vio su buzón lleno, debe haber millones de mensajes de Cristina, de Fedora o incluso de Fernando, y comenzó a escuchar pero su corazón. casi se detiene al escuchar la última, esa voz fue capaz de hacer que tu corazón dejara de latir.

"... Hola, soy Alicia... seguro que sabes que soy yo - ríete - Llamé porque sabía que no contestarías, necesitaba dejar este mensaje porque no tengo el coraje de ir allí, don no juzgues despues de todo no me buscaste todos estos dias o sea ya me diste tu respuesta.... tu y yo ya no existiremos pero por eso llamo, era para despedirme, mañana yo viajar a África por una nueva empresa que debería durar dos años, una gran oferta de trabajo... Tal vez no hayas pensado en mí como yo pensé en ti todos estos días, no sabes lo difícil que es para mí no ir a buscarte mas, despues de todo, que sentido tiene ir a buscarte mas eso no es lo que querias, fue dificil tomar esta decision de mi parte de irme, cuando mi corazon solo queria quedarse contigo...frente , te queda mucho tiempo de vida, es una pena que no esté incluido en esto. Ok, basta de hablar de eso - Risa nerviosa - Solo quiero Iba a decir que siempre te amaré, pero desafortunadamente no pude esperar para siempre, así que... Cuídate por favor y tal vez algún día nos veamos... Te amo.

Cuando terminó el mensaje Martín ya estaba llorando, Alicia se equivocó al pensar que no había pasado esos días pensando en ella, pero Martín fue tan cobarde que no la persiguió. Peor estaba por perderla, sabía que lo que sentía era amor, peor, perdería al amor de su vida por miedo y cobardía y no porque quisiera. Pero para hacer algo relevante, Martin simplemente se quedó allí llorando.

Al día siguiente Martín se despertó a las siete de la mañana, se dio una ducha rápida, se vistió con ropa cómoda y no tomó café, pidió un taxi y fue al departamento de Alicia, había decidido que debía hacer algo, aunque fuera para despedirme en persona, necesitaba decir lo que sentía, pero lo que pasó no estaba en sus planes, Alicia no estaba allí, decidió ir a la empresa para estar definitivamente allí.

Fernando - Hola Martin, cuanto tiempo, como estas? - Fedora sorprende a Martin con un abrazo - Mis condolencias para tu padre.

Martín - Gracias, ¿Sabes dónde está Alicia? Necesito hablar con ella urgente.

Fernando - Bueno - se rasca la cabeza. - ¿No te dijo que iba a viajar? Porque en este momento ella está en el aeropuerto casi embarcando.

Martín- ¿Qué? No, no puede ser, pensé que no lo sería tan pronto - suspira.

Fernando - A lo mejor si coges un taxi y va rápido y llegas a tiempo, tienes treinta y cinco minutos contados.

Martín - Ay gracias, gracias Fernando, te mando un mensaje para que hablemos mejor - Dice en la puerta de salida

Fernando - Buena suerte.

Ni bien subió al taxi le pidió al chofer que fuera al aeropuerto lo antes posible, había poco tráfico así que cuando no quedaba mucho pagó el taxi y dejó el taxi corriendo entre los autos, eso en otro momento para él sería una locura, pero ahora no, en ese momento la única manera de no perder a la mujer que amaba, sí, amaba y Alicia necesitaba saber, antes de que fuera demasiado tarde.

Cuando por fin entró al aeropuerto y salió mirando las pantallas de los vuelos y su corazón dejó de latir al ver que el vuelo desde África ya había despegado.

Martin - No, no puede ser - se dijo - debe haber otro.

Martín se acercó a una ventanilla pasando por delante de todos, podía escuchar a los demás quejarse por cortar la fila, solo le preguntó a la chica si aún le quedaban más vuelos a Sudáfrica, pero ella aseguró que lo que tenía esa mañana era el solo uno y ya estaba despegando. Podía ver a través de la gran ventana de vidrio el avión despegando y con eso todas sus posibilidades se desvanecieron, sus ojos se llenaron de lágrimas y dejó esa ventana desolada. En su mente empezaron a pasar todos los momentos que había tenido con Alicia y que estúpido había sido por no haberle dicho antes lo que sentía, ahora ya era tarde, ella se había ido y dejado con ella todo ese amor que no le había dejado.

El marido del amante de mi maridoOnde histórias criam vida. Descubra agora