Mi deber era cuidarte, el tiempo decidió que era quererte (Finalizado)

8.

-papa, papa -sacudí a papa mientras saltaba, pero en vez de que el despertara sentí una mano detrás de mi espalda antes de ser empujada, antes de que yo misma me diera cuenta estaba entre los brazos de papa, infle mis mejillas - ¡papa!, es hoy -este año cumpliría siete, por lo que este año iniciare la academia.

-siempre llego tarde -él dijo con simpleza, me sentí indignada, puede que llegue tarde, pero yo no lo hare.

-vamos arriba -dije tratando de zafarme del agarre de papa, él se negó, el abrió los ojos y soltó un falso bostezo como si acabara de despertar.

-oh, buenos días bebe -negué con la cabeza cuando beso mi mejilla

-yo ya no soy un bebe papa -él se encogió de hombros

-fuiste un bebe, para mí siempre lo serás -de nuevo ese sentimiento de indignación lleno mi ser.

- ¡vamos, vamos! -papa finalmente suspiro, soltándome, por lo cual supe el no tardaría mucho en levantarse.

-naruto.... Ya sabes -me puse un poco triste al recordarlo

-está bien papa tiene una misión puedo ir sola -sonrei, él tenía una mirada perezosa, pero me sonrió.

Me bañé con rapidez, saliendo con rapidez del baño con mi bata puesta, vi a papa que estaba haciendo el desayuno y al lado había un obento.

-naruto no eres un pez, te enfermaras si te quedas en bata mucho tiempo -salte antes de inflar las mejillas.

-lo sé, me voy -di media vuelta corriendo a mi habitación.

Usaba un pantalón pegado de color naranja, una camiseta negra que tenía pegada una máscara, por encima una chaqueta grande del mismo color que la camiseta, oh y unas sandalias shinobi de color azul .

Cuando Salí del cuarto y me senté frente a papa empecé a comer con rapidez.

Sentí como papa cepillaba mi cabello, era algo largo me llegaba un poco más debajo de los hombros y siempre era muy feo peinarlo por la mañana, papa dice que es porque es ondulado y esponjo que por eso se enredaba con facilidad, el termino atándolo con un lacito rojo, en una cola de caballo.

Cuando puse el ultimo bocado en mi boca me levante saltando de mi asiento, agarre la mochila que estaba en el sofá.

me detuve en seco antes de dar media vuelta y ver que papa aun comía lentamente su desayuno, lo abracé lo mejor que pude, antes de que sentir como revolvía mi cabello que me llegaba hasta los hombros -adiós papa -

-adiós naruto -el beso mi frente antes de dejarme ir, ahora si con todo hecho, me eché a correr hacia la puerta y me fui...

-hola shikamaru -salude alegremente, viendo que estaba con alguien más.

-oh, hola -él dijo dando un bostezo antes de mirar a quien lo estaba acompañando.

Era regordete y tenía remolinos en las mejillas, enseguida me di cuenta de quien era porque shikamaru lo había descrito antes -¿eres chouji?, ¿verdad? -me acerqué dando unos saltitos sobre mis pies.

-s-sí, t-tu eres naruto -asentí con la cabeza a pesar de que chouji no estaba preguntando.

-espero que podamos ser amigos -dije alegre mientras me alejaba para caminar al lado de shikamaru, chouji tenía una pequeña sonrisa en su rostro, estaba confundida, pero lo había dejado pasar...

Kakashi no pudo evitar preocuparse, asuma podría llamarlo acosador o lo que sea realmente no le importaría.

Naruto, su hija estaba en un lugar nuevo y rodeado de los niños que la han estado evitando en los parques, los adultos la miraran con desprecio así que si, asuma puede decir lo que quiera si llega a ver a kakashi sentado en la rama de un árbol mirando a los aldeanos despidiéndose de sus hijos, quería ver como naruto caminaba por su cuenta, quería estar cerca por si necesitaba levantar a naruto y protegerla pero sin estar lo suficientemente cerca para que su instinto no le grite que esconda a naruto detrás de sus piernas o que la levante y tape sus oídos.