415 69 0
                                    

La anciana estaba limpiando la barra de su cocina tranquilamente. Alzo la mirada al escuchar la puerta cerrarse, su expresión rápidamente cambio.

— ¿Estas bien? — Salió de la cocina, preocupada.

Sana se volteó hacia a ella, dejándola ver como estaba aguantando sus lágrimas lo más que podía para no romper en llanto aun cuando su rostro ya estaba manchada por estas

— La amo mucho. — Su abuela se acercó a ella rápidamente, abrazando el cuerpo de su nieta cuando se abalanzo contra ella. — La amo tanto que quiero protegerla de todo. — Su voz se quebró y el llanto acompaño sus palabras.

Sana quiso decir más cosas, pero no pudo, y la mujer se quedó con la duda lo que resto de la noche

...

Tzuyu suspiro al ver las luces prendidas de su hogar. Lo pensó por varios minutos, pero al final se dijo que era mejor entrar y afrontar lo mismo de todas las noches de una vez.

Intento hacer el mínimo sonido posible al abrir la puerta y cerrarla, pero él la noto; estaba cenando solo en el comedor.

— ¿Dónde estabas? — Demando saber y ella solo lo ignoro y comenzó a subir las escaleras, aumentando la velocidad cuando escucho la silla arrastrarse. — ¡Tzuyu!

Cerró la puerta de su cuarto con un portazo sin querer y a los segundos una serie de golpes resonaron en la madera.

Dejo caer su mochila y luego se dejó caer en su cama a tiempo que los golpes cesaron y escucho a su padre bajar.

— ¡¿Que son esos gritos?! — Su madre al poco tiempo bajo de su habitación y las habituales discusiones empezaron.

Tenía un poco de tiempo para salir de su zona de confort y bañarse antes de que su mama terminara llorando del coraje, rechace las disculpas de su padre y haga que este se vaya de la casa por un tiempo, llegue como a las tres de la madrugada y duerma con su esposa como si nada hubiese pasado.

Le mando un mensaje a su novia avisándole que ya llego y se fue a bañar. Con suerte y se dormiría con la música puesta y se levantaría en la madrugada a cenar algo ya que no baja una vez que este arriba.

Gracias ‣Satzu (hiatus) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora