Capítulo 22

17 1 0
                                    

Sean me sonríe y baja hasta que su cara está muy cerca de mi intimidad tapada por el pantalón aún.

Ancla sus dos manos en la cinturilla de mi pantalón de chándal. Me aguanto la risa cuando mi ropa interior es revelada.

Sean la observa por un par de segundos y levanta su mirada. La vuelve a bajar a la prenda y veo como intenta aguantar la risa.

—¿De donde sacas estas cosas? —pregunta riéndose y apoyando su cabeza en mi barriga.

—¿De la tienda?

Me mira sonriendo y se arrastra hasta que su cara está muy cerca de la mía.

—Me gusta mucho tu ropa interior, así lo que vas a hacer es que quiera quitarte la ropa siempre.

Levanto una ceja. Voy a hablar cuando me calla besándome.

Le sigo el beso y paso mi mano por su espalda, cuando llego al final de esta bajo hasta su culo y lo aprieto haciéndolo reír sobre mis labios y subo la mano hasta el borde de su camiseta. Con ayuda de mi otra mano empiezo a quitársela, me separo de él para poder sacarla por su cabeza y lo vuelvo a besar con ansias.

Mientras nuestros labios se mueven con hambre acaricio su espalda hasta que me canso y me separo de sus labios para empujarlo por el hombros y subirme encima de él.

Empiezo a besar su pecho y voy bajando hasta que llego a su ombligo, llevo mis manos hasta el botón de sus pantalones y lo desabrocho, subo mi mirada hacia él antes de empezar a bajarle los pantalones.

Veo como cierra los ojos cuando meto mi mano en sus calzoncillos y la cierro al rededor de su miembro. Le quito la prenda y vuelvo a colocar mi manos al rededor de su intimidad.

Lo miro en todo momento desde que empiezo a mover mi mano hasta que él gruñe y se corre.

Acerco mi cara a la suya y empiezo a depositar pequeños besitos en sus labios. Él acaba sonriendo y eso me hace sonreír a mi.

Sean me agarra la cara y me besa dulcemente. Me agarra de la cintura y nos gira para estar él sobre mi.

Sin aún separarse de mis labios coloca su mano en mi estómago y la baja lentamente hasta colocarla completamente sobre mi ropa interior.

Suspiro cuando presiona ahí y el no tarda en quitarme las bragas y empezar a acariciar con delicadeza mi sexo.

Suspiro otra vez.

Al cabo de un ratito acariciando, Sean se decide a introducir un dedo y jadeo.

Se separa de mis labios para respirar y se queda observandome mientras no deja de mover su dedo.

Arqueo mi espalda y suelto el aire por la nariz cerrando los ojos cuando siento su dedo más profundo. 

Cuando abro mis ojos Sean me mira sonriente y yo le devuelvo la sonrisa como puedo.

Gimo, sonríe. Vuelvo a gemir, vuelve a sonreír... Y así durante todo el tiempo.

Gruño cuando estoy a punto de llegar pero el se detiene.

—¿Qué pasa? —vuelvo a gruñir.

—¿Me dejas probar una cosita?

Frunzo el ceño.

—¿El qué?

Él sonríe y baja hasta que su cara está a milímetros de mi intimidad. Cierro mis ojos cuando noto su aliento chocar ahí.

—¿Qué me dices? ¿Puedo?

Otra vez su aliento chocando contra mi sexo.

Asiento como puedo pasándome la lengua por mis labios hinchados.

Volveré a verte ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora