CULPA / SAIDA

Cap. 31

23 de Agosto.

—Me enteré de un lugar a la venta a las afueras de la ciudad.—Contó Momo mientras almorzabamos juntas como siempre.

—¿Dónde exactamente?.—Pregunté curiosa, hace tiempo venía buscando lugares que se adapten a mi presupuesto para salir de casa una vez acabada mi carrera y ser independiente lejos de mis padres.

—Al norte, lejos de tu familia como querías.—Mi rostro se iluminó, pero primero quería saber más sobre el lugar. —Es una casa pequeña en un gran terreno, conseguí anotar el número por si te interesa.—Busco en su móvil copiandolo en mi chat y enviandolo.

—Si, gracias.—Dije con evidente emoción, agendando el número para llamar luego.—Espero por fin encontrar el lugar que tanto busqué.

—Es realmente difícil encontrar hasta un departamento hoy en día.—Aportó Nayeon chistando como una señora haciéndonos reír a todas.

—La vida adulta ya es dificil.—Exclamó Jeongyeon, quién vivía sola ya hace un par de años atrás, desde muy joven para ser exactos, su padre la corrió de casa luego de enterarse de su gusto por las mujeres, es triste que la realidad de muchas sea esa luego de salir del closet.

—Y hablando de cosas difíciles, ¿Dahyun está otra vez ocultándose de los espías de tu hermano?.—Negué, Chan raramente había bajado bastante la guardia esta semana dejándonos vivir un poco más tranquilas. Quiero pensar que ya se resignó con Dahyun luego de los primeros días desde su ruptura, estaba orgullosa de que ella se mantenga en su postura pese a las amenazas de mi hermano, demuestra lo valiente que es y no podía gustarme más ese lado.

—Tiene un examen mañana, está en la biblioteca junto a Chaeyoung. —Mina asintió en confirmación.

—¿Y Tzuyu?.—Le preguntó ésta vez Nayeon a Momo.

—Con ellas también, estuvo conmigo un tiempo antes de que ustedes llegaran.—Contó Momo.—Son un trío inseparable.

Las cosas con Dahyun iban cada vez mejor, tenemos una conexión que hace especial todo y me gustaría que esto siga así porque lo estaba disfrutando demasiado. Tenemos pequeñas citas en momentos libres que nos une más en lo que sentimos, por suerte en este último tiempo ella pudo poco a poco volver a estos almuerzos, mis amigas aman a las suyas y todas juntas somos un grupo icónico.

Luego del almuerzo fui por Dahyun para escaparnos un poco de la rutina e ir a un pueblo a unos kilómetros de aquí, sería algo pequeño pero significativo para despejar nuestras mentes del estrés y preocupaciones que trae consigo la universidad, este sería solo un par de horas ya que ella tendría que volver a estudiar por la tarde.

—Al fin contigo.—Exclamó Dahyun tirándose hacia a mi en un pequeño abrazo cuando llegué a la biblioteca.

—¿Lista para nuestro viaje?.—Le di un suave beso en la sien separándonos para mirarla, la biblioteca después del almuerzo se encontraba vacía así que estábamos seguras con nuestra interacción.

—Lo necesito más que a nada, no veía la hora de sacar mi cara de los libros.—Exageró y sonreí tomando su mano para salir de allí.

Una vez en el auto cantando canciones que colocaba Dahyun nos dirigimos a un pequeño pueblo turístico, es lindo hacer esto de vez en cuando porque sentimos la paz de no tener que escondernos, estas últimas semanas fueron hermosas a su lado. Descubrir su ser por completo poco a poco es darme cuenta del privilegio que es tener a Dahyun en tu vida, la mía cambió radicalmente con su presencia.

—Es hermoso este lugar.—Habló Dahyun una vez que bajamos del auto, había una pequeña feria que abarcaba gran parte del centro de la ciudad, varías personas recorriendo rodeadas de un clima cálido y tranquilo.