692 47 3
                                    

" Feliz día del padre "
Cinco Hargreeves.
Edad: 26 años.

- ______ -

— ¿Me perdonas?.— le pregunté a Cinco mientras lo abrazaba por la cintura y este se estaba amarrando la corbata.

Giró para verme y besarme castamente en los labios.

— Te entiendo por dos razones; yo también estuviera celoso si alguien más te tomará de la mano con otras intenciones y la segunda, es por nuestro regalo.— sonrió y asentí nerviosa.

— ¿Crees...crees que a papá le guste nuestro regalo?.— titubee.

— Claro que si, amor. Se pondrá feliz.— me acarició la mejilla.

— Bien. Iré a cambiarme.— me separé de sus brazos.

— Te espero, bonita.— me tiró un beso a lo que sonreí.

Me aliste colocándome un vestido naranja bajo, un listón en mi cabello para tomar unos pequeños mechones y unos zapatos con poco tacón.

Al salí ví a Cinco quien se estaba limpiando los ojos con su pañuelo, al parecer estaba llorando.

— ¿Amor, todo bien?.— me acerqué.

— Si , es solo que todo esto...me vuelves sentimental, mujer.— rodó los ojos divertido.

— Me alegra hacerte sentir eso. Aunque no lo creas, es lo mejor que he escuchado hasta ahora.— lo besé tiernamente.

— Tengo miedo de que todo esto sea un sueño...y que tarde o temprano despierte. Solo mírate...eres hermosa, perfecta y yo...yo nada.— se sentó cubriéndose la cara.

— Cinco Hargreeves, ¿Como te atreves a decir eso?. Eres el mejor chico que he conocido, el único que me ha hecho sentir cosas que ni siquiera imaginaba que existían.— negué con una sonrisa.— Eres excepcional...

— Pero no perfecto para ti.— susurró

— Ok, es lo que quieres escuchar...bien. No eres perfecto para mí, así que yo menos para ti. Todos tenemos defectos y cometemos errores como cualquier otra persona...es normal al igual que aprender de ellos para ser mejores personas.

— Tengo miedo...miedo a que el me tenga miedo....soy un monstruo. ¿O ya olvidaste la temporada en la Comisión?.

— No pero tenemos que si queremos ser excelentes personas para el.— expliqué.

— ¿No me abandonaras?.— preguntó nervioso a lo que negué.

— No tengo pensado hacerlo.— se levantó para abrazarme por la cintura.

— Te amo, mujer.— me besó.

— Yo te amo mucho más.— lo besé. Este me tomó la mano para colocarla en su hombro dejando la otra sobre mi cintura a lo que lo abracé con mi otro brazo.

— ¿Me permite bella dama?.— junto nuestras frentes.

— Adelante, bello príncipe.— empezamos a movernos mientras Cinco tarareaba nuestra canción.

ᴼᴺᴱ ˢᴴᴼᵀˢ // ᴬᴵᴰᴬᴺ ᴳ. ⁻ ᶠᴵⱽᴱ ᴴ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora