Cambio radical

Capitulo 20

Capitulo 20

POV MARÍA

Ian llevaba un rato acariciándome la pierna esperando algún tipo de respuesta por mi parte, pero no pensaba dársela, hasta que lo miré y pensé: si los chicos se pueden aprovechar de las chicas, ¿por qué no aprovecharme yo ahora de él? Pongo mi mano en su pierna y empiezo a acariciarla poco a poco, pero escucho un ruido en otra mesa y luego a Hanna llamando a Carlos, me doy la vuelta y veo que éste se ha ido sin apenas haber comido y Allison ha ido detrás suyo. Algo raro lleva pasando estos días con ellos pero no tenía ni idea de que podía ser, aunque tampoco me importaba mucho.

Continúo acariciandole la pierna de arriba abajo y acercándome más a la zona de su entrepierna, no me sentía yo misma, pero no me importaba, entonces Ian se acerca a mi.

-Como sigas así, vamos a tener que salir de aquí e ir a un lugar más privado si no quieres montar un espectáculo, que por mi perfecto-me dice Ian al oído. En ese momento me ruborizo y aparto mi mano de su pierna para seguir comiendo.

Cuando acaba la hora del almuerzo, no me apetece para nada entrar en clases, a si que decido ir a un lugar tranquilo fuera del instituto, perder una clase o tal vez tres no le va a hacer daño a nadie.

Me dirijo a la parte de atrás del instituto donde la gente lista y las parejas felices se suelen poner para estudiar, leer y eso, cosas que yo solía hacer muy a menudo.

Cuando llego busco un lugar vacío, pero cambio de opinión en cuanto veo a Carlos solo sentado en uno de los bancos más apartados de aquel sitio. Me dirijo hacia él y me siento a su lado

-Es increíble cómo hace días yo habría sido incapaz siquiera de haberme sentado en la misma zona en la que estuvieras tú y ahora estoy sentada en el mismo banco, esperando yo que se qué-le digo

-¿Qué quieres?

-Vamos no seas borde, solo quería hablar un rato contigo, llevo viéndote raro unos días

-María, si alguien te manda a hacerme compañía o algo por el estilo de verdad que no lo intentes, no la necesito, por favor, dejame en paz ahora mismo

-Vamos, estás teniendo una actitud de niño chico, nadie me manda a hacerte compañía, solo he visto que alomejor la necesitabas

-Te equivocas

-Vamos enserio Carlos, por favor, no seas así, habla conmigo o algo, puede que no sea la persona que mejor pueda ayudarte pero te aseguro que soy de las que más te conoce, si supieras la cantidad de cosas que se sobre ti te asustarías te lo aseguro.

-¿Qué sabes sobre mí?

-Llevo como 4 años enamorada de ti, y en esos años todos y cada uno de ellos me los he pasado observándote, anotando cada detalle tuyo, puede que suene un poco de acosadora, pero es así

-¿Llevas?¿Todavía lo estás?

-Estar enamorada de alguien no es algo que desaparezca de un día para otro, con lo cuál, puede que lo siga estando.

-Es bastante curioso como pueden cambiar las cosas de una semana para otra, o simplemente de un día para otro, puede que hoy estés en lo más bajo y mañana en la cima, o puede que la semana pasada estuvieras feliz saltando de alegría y esta semana estés todo el día de bajona, es bastante curioso pero es lo que me pasa a mí cada vez que estoy contigo

-¿A que te refieres?

-Es demasiado complicado como para explicarlo todavia- me dice, pero no se como tomármelo si como algo bueno o malo.