Capítulo 12

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Una pequeña niña se encuentra llorando en una de las habitaciones del castillo de su padre en completa oscuridad y soledad.

El ambiente era tan frío que no se podía saber si era debido a que afuera llovía y el día estaba oscuro o debido a que horas antes su progenitora había fallecido de un paro cardíaco.

— ¿ C-cómo es posible si madre no sufría de ninguna enfermedad ? - la pequeña lloraba sin parar mientras abrazada con fuerza sus piernas.

La puerta es abierta de inmediato dejando ver a una mujer de cabellera negra como la noche la cual la ve con claro despreció en su mirada.

— Ya deja de llorar está muerta todos mueren tu también lo harás - se acerca asta la pequeña tomándola con fuerza del brazo y levantándola de golpe haciendo que suelte un quejido de dolor.

— Vamos tu padre tiene un anunció importante que dar.

La ojimenta se levanta sobresaltada y respirando con dificultad enmedio de la noche al volver a tener esa misma pesadilla de nuevo.

— Ya paso... solo fue un sueño - habla para si misma tratando de tranquilizarse - Todo estará bien.

Sin más baja de la cama colocándose una bata para salir de su habitación a dar un paseo en el jardín con la esperanza de tomar aire fresco y despejar su mente.

La brisa de la fría noche hace que le sea más sencillo alejar los malos pensamientos.

Observa con interés la hermosa luna llena que está en el cielo adornandolo por completo haciendo que transmita tranquilidad.

Estaba tan distraída que no noto cuando una sombra se movía detrás de ella cuando reaccionó era demasiado tarde y una palma grande y fría se encontraba sobre su boca evitandole gritar.

Trato de forcejear con todas sus fuerzas pero era imposible liberarse por si misma poco a poco fue testigo de como la llevaban lo más lejos posible del ducado Rass.

Sabía a la perfección de quién era el responsable del atentado y que si lograban sacarla del territorio de los Rass estaría perdida.

¡ Alguien ayúdeme !

¡ Conrand !
¡ Por favor que alguien me ayude !

¡ Sir Carsein !

Sus ojos se llenaron de terror cuando una segunda sombra apareció sosteniendo entre sus manos una filosa daga la cual poco a poco se acercaba a su cuello.

Ellos claramente iban a matarla y nadie podría salvarla esta vez.

¡ No !

¡ Alguien por favor !

Cerro los ojos con fuerza al ver como poco a poco estaba por abandonar este mundo.

Tuvo que ahogar un grito de dolor cuando sintió el acero frío empezar a cortar su piel cuando ya todo estaba perdido lo único que escucho fue un fuerte golpe.

Y luego ya nadie la sujetaba haciendo que callera al suelo de inmediato.

Con sorpresa abrio los ojos encontrándose con Carsein quien a comparación del de siempre era totalmente diferente.

En sus ojos no había ni una sola pizca de piedad más que un profundo odio haciéndolo lucir como alguien completamente diferente a diferencia del torpe chico de siempre.

Antes de que pudiera salir de su asombro el pelirrojo alzó su espada y sin dudar le corto el cuello de uno de ellos haciendo que su casamisa blanca se salpicara de sangre.

Sin perder el tiempo se dirigió asta el otro a quien sin esfuerzo derrumbó para después atravesarlo con su espada.

Adel observo esa tétrica escena sin pestañar había pasado por muchas cosas en su vida pero nunca había visto a alguien asesinar sin piedad a otras personas frente a sus ojos.

Después de acabar con ambos el chico tiro la espada hacia un lado y quitándose los guantes manchados con sangre los lanzó hacia un lado sin interés.

En ese momento Conrand y Mily llegaron a presenciar la escena quedando ambos igual de sorprendidos que su señorita.

— Será mejor que se deshagan de los que aún quedan si no me equivoco deben de estar esperado a sus compañeros a menos de cuatro metros - hablo el chico aún con una expresión totalmente fría la cual ninguno de los presentes había presenciado antes.

— Yo me haré cargo - y sin más saca un pañuelo de la bolsa de su pantalón para hacer presión con el en la herida de su prometida.

— ¡¡ Que están esperando !! - su voz y mirada se volvió más seria haciendo que ambos jóvenes se apresuraron a cumplir con lo ordenado.

— ¿ Estas bien ? - preguntó observándola de forma fija en busca de más heridas.

La pelifuscia apenas logro asentir sin apartar la vista de los cuerpos que yacían sin vida a escasos centímetros de ella.

Con cuidado la cargo entre sus brazos hacia la mansión Rass donde al llegar la dejo sobre la cama de su habitación para luego ir en busca de algo para parar el sangrado.

Después de curar su herida y vendarla ambos estaban en silencio.

— Se que tienes muchas dudas y las responderé pero no ahora aun no es el momento.

— Ahora estas a salvo mi padre y hermano están inspeccionando la mansión además tu dama de compañía y caballero son muy hábiles capturaron sin problemas a los demás.

— Gracias.

— ¿ Eh ? - Carsein acababa de quedarse sorprendido esperaba cualquier reacción de parte de ella menos que le agradeciera y verla con un semblante de angustia y preocupación al igual que una ligera mezcla de terror.

Pero como siempre no duró mucho tiempo y su rostro volvió a tener una expresión neutral.

— Puedes dormir aquí hoy,  volveré después tengo que verificar la información del los asesinos que logramos atrapar.

— El médico de la familia ya se dirige hacia acá se paciente en unos momentos estará aquí- sin más se puso de pie dejándola sola.




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⏰ Última actualización: Aug 18 ⏰

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