LOS FLASHES DE LA CÁMARA HACEN QUE PAREZCA UN SUEÑO (Supercorp)

Capítulo 2: Irlanda

          “Nací el trece de diciembre”, dijo Lena, con una mirada vidriosa en sus ojos mientras hablaba, mirando el cielo gris afuera, pensando en la mejor manera de explicar el comienzo de su vida. Había muy pocas personas que sabían la verdad sobre su nacimiento y las circunstancias que rodearon los primeros años de su vida, y definitivamente no era de conocimiento público, lo que la dejó un poco incómoda al hablar sobre ello.

            “En mil novecientos ochenta y nueve, ¿verdad? Tu álbum…”

            Una rápida sonrisa cruzó el rostro de Lena mientras se concentraba en Leslie por un momento, "sí, exactamente".

            La gente siempre había hablado de los años ochenta con cariño. Buena música, atuendos extravagantes y nostalgia de tiempos mejores. Lena se había perdido todo eso. Había nacido casi a mediados de diciembre, pasando poco más de dos semanas en los ochenta, antes de que la década de los los noventa llegara, pero la forma en que la gente hablaba de los ochenta había dejado un profundo impacto en ella. Había pasado innumerables horas escuchando la música de esa década, y esa música le había marcado el camino cuando hizo el cambio de la música country a la música pop. Le había parecido correcto ponerle el nombre del año en que había nacido, siendo, en cierto sentido, renacida en un género musical diferente.

            Con un suave suspiro, cerró los ojos por un momento, antes de tomar una respiración profunda y abrirlos de nuevo para mirar la vista fuera de sus ventanas. Había pasado mucho tiempo desde que habló sobre su infancia, aunque gran parte de ella estaba documentada en sus álbumes anteriores, antes de que recibiera duras lecciones de vida y aprendiera un poco sobre el amor. Había cambiado mucho desde entonces, y en cierto modo, fue debido a la infancia que había tenido que la llevó a través de la serie de eventos que condujeron a los grandes cambios en su vida. Si no hubiera sido por la forma en que se desarrolló su infancia, nunca se habría hecho famosa. Claro, ella habría escrito canciones, poemas, historias, pero no estaba tan segura de que se hubiera vuelto famosa. Eso solo se basaba en el hecho de que había sido criada por los Luthor.

            Ella no había nacido en la familia, aunque era hija de su padre. Durante los primeros cuatro años de su vida, los había pasado con su madre, la que la había dado a luz. Lionel y Lillian sabían de su existencia, por supuesto, y le pagaron a su madre para que la mantuviera callada cuando apareció con un bebé, pero cuatro años después, ella murió. Estaban visitando a unos parientes en Killarney cuando su madre se ahogó y su padre había ido a buscarla y se la había llevado a Wexford con él. Lillian había aceptado el arreglo, y eso había sido todo. En lo que respecta a todos los que conocían, los Luthor la habían adoptado y nadie sabía de la aventura de su padre con otra mujer. Para el resto del mundo, había nacido de sus dos padres, una decisión que se tomó al comienzo de su carrera para proteger su imagen. 

            Era un secreto bien guardado, uno que nunca había sido cuestionado. De ambos padres, la mayoría de la gente estaría de acuerdo en que ella se parecía a Lillian. Se había convertido en un hecho tan silenciado que nunca se había hablado de ello fuera de su familia, y Lena se sintió casi culpable cuando le reveló el hecho a Leslie, como si estuviera despreciando a Lillian como su verdadera madre. Aparte de algunos fragmentos de recuerdos, no podía recordar en absoluto a la mujer que la había dado a luz. Todo lo que tenía eran vagos recuerdos de salpicaduras de agua mientras la veía ahogarse, el olor de su perfume y una imagen borrosa de una mujer dándole un osito de peluche.