Lovely Changki

♮ᵈⁱˢᵗᵃⁿᶜᵉ〗

Así que no vengas a buscarme ahora
Aún que te ame demasiado ya estoy cansado
Si nos llegamos a encontrar solo sigue de largo y pasa de mi.
Por favor, alejate de mi ahora mismo también.
¿Cuánto más tengo que gritar?

🍒

La necesidad de tener su aliento mezclandose con el mío se siente como las millones de personas que tienen una taza de café caliente en su mano; lista para que sus labios se peguen a la porcelana y su boca reciba el primer sorbo.

Sus besos se sienten como el café hirviendo: dolorosos, ardientes y energéticos.

Pero es aún mejor cuando se mezcla con alcohol, seguido de mis sentimientos por él; ese primer sorbo se siente tan anhelador, haciéndome caer por él, una y otra vez.

Como ahorita que con su pulgar traza esa fina línea carnosa que delata la sonrisa de mis delgados labios tan seductor y soñador, así eres tú Yoo Kihyun.

- ¿En qué piensas?

Dejo mi taza aún humeando y cortó la distancia entre ambos para volver a sentirlo en mis brazos, su cabello revuelto y la calidez de su cuerpo hacen eco en cada herida que ha creado y sanado en mi solo para volverla a abrir y hacerla doler más.

Era sádico y dulce.

- En el café

Respondo aún estrechandolo y sollozando por dentro.

Cómo me dolía amarlo.

- En el café

Su corta risa choca con mi pecho

- Cada vez pierdes más la cabeza

Vuelve a reír y se apega más a mi.

Agachó mi cabeza un poco para dejar un casto beso en la suya, inhaló con fuerza y cierro mis ojos dejando que las primeras lágrimas salgan.

No lo lamento, no lo lamento.

Me digo a mi mismo y vuelvo a besar su cabeza.

Mi pecho arde y mi cabeza se siente pesada.

- Has estado actuando extraño Kyunnie... ¿Qué pasa?

Sus ojos me ven pero yo no puedo atravesarlos hasta llegar a su corazón y saber por qué ha dejado de amarme, desde cuándo dejo de hacerlo y por sobre todo; si alguna vez lo hizo.

Mis orbes cafés solo se dedican a detallarlo y adorarlo con dolor.

- Así vamos a terminar.

Hablo después de lo que para mí es una eternidad y me separó de él.

Puedo ver cómo su cuerpo se paraliza y agacha su rostro, lleno de pena y vergüenza.

- ¿Desde cuándo lo sabes?

Me pregunta y yo cierro mis ojos dejando que otras lágrimas viajen por mis mejillas.

- Un año, en nuestro sexto aniversario... Aquella noche dejaste tu maletín abierto, creí que fue a propósito ya que solemos hacer ese juego de dejar pistas y terminar en la cama...

Tomo una bocanada de aire y con mis palmas temblando por el miedo de soltar las palabras.

- Y lo encontraste

Completa él.

Todo mi cuerpo se siente pesado y mi corazón sangra como las lágrimas que resbalan y viajan en mi rostro.

-¿Si quiera lo lamentas?

Pregunto dejándome caer en un sillón. Kihyun me ve y yo solo pienso que no puedo perdonarlo más, tanto había vivido por él, desde engaños hasta maltrato y humillaciones. Era demasiado ciego para ver lo poco que era para él.