De reojo noté como entrabas al pasillo, mi corazón amenazaba con salirse cuando sentí tus pasos apresurados detrás mi, pero como si hubieras leído mi mente y escuchado mis suplicas a unos cuantos pasos de distancia te detuviste...y aunque yo pude quedarme de espaldas siempre, y solo pedirte que te fueras, aunque pude hacerlo, e incluso quería hacerlo, solo no lo hice, y yendo contra todo mi ser me giré para encararte.
No me importaron las lagrimas, el dolor o como luciera en ese instante, ese era el momento de enfrentarte, de terminarlo todo, de dejarte ir. De empezar de cero. De sanar.
Poco a poco giré mi cuerpo y mi mirada encontró la tuya, el ruido de la fiesta fue inaudible, se sintió como si el mundo se hubiera detenido, como si nada más existiera en ese instante, y solo fuimos tú y yo de nuevo, otra vez, después de mucho tiempo... pero ya no se sentía igual, ya no te veo perfecto, ya no eres diferente, ya no eres incomparable, ya dejaste de ser él indicado, ya simplemente no eres mi lugar.
Ambos queríamos romper el silencio que se había formado, ambos teníamos algo que decir, pero cada palabra continuaba atascada y solo estábamos ahí, viéndonos el uno al otro, sumergidos en recuerdos, dándonos cuenta del tiempo que había pasado de lo mucho que todo había cambiado.
En algún momento mis lágrimas cesaron, mi corazón tomó sus latidos normales y cuando tomé el valor para hablar escuche tu voz resonar en mis oídos.
Dijiste: "Lo siento" tú voz sonaba rota, perdida, arrepentida.
Quisiera decir que sirvió de algo, que sentí que mi corazón se armaba, que todo cobraba sentido, pero nada de eso pasó, porque ese "lo siento" no reparó las inseguridades que me dejaste, las lágrimas que derramé, las noches que sentí que el mundo se me venía encima.
Ese "lo siento" no justifica todo lo que por ti he pasado, pero aunque quise gritarte o golpearte, no lo hice. No hice nada...me quedé paralizada, perpleja. Porque aunque soñé e imagine mil veces este encuentro, jamás imagine verte así, jamás imagine que sería así. Espere tanto esto que simplemente ahora que está sucediendo no puedo reaccionar, no puedo hablar.
Segundos después vi como te acercaste a mí, y quisiera decir que sentía como mi cuerpo vibraba, como mi piel exigía tu tacto, como se me aceleraba el corazón pero nada de eso pasó. Sin embargo por alguna extraña razón no podía moverme, no podía hablar...
Pasaste tu mano por mi mejilla, y tus labios encontraron los míos en un beso profundo, repleto de anhelo, de palabras que no fueron dichas, de sentimientos que aún existen, de todo lo que fue y ahora simplemente ha terminado.
La familiaridad en tus labios no me extrañó, pero si el beso, que no fue casual, si no que fue profundo, que fue único, diferente, uno de esos besos con sabor a te extrañé...
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NOTA DE AUTOR: No se preocupen, yo todavía estoy procesando todo, así que si dejaron de leer un segundo y se detuvieron a preguntar ¿qué mierda esta pasando? Los entiendo más de lo que creen.
¿Whattttt? ¿Como es eso que la besó?
Sigue, sigue...que esto está para morirse:c
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Los Mensajes Que Nunca Te Envié ©
Teen FictionSinopsis: Él era su mundo. Él era su hogar. Él era lo que ella más amaba. Pero... ¿Qué haces cuando la persona que más amas en el mundo te traiciona? ¿Qué haces cuando tu mundo se vuelve tóxico? ¿Qué haces cuando tu hogar ya no lo es más? Esta es...