El Inicio Del Fin [Cinco Hargreeves Y Tn]

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—¿Ben?...¿Eres tú?—Me sorprendió, no podía creerlo. Estaba en una edad Intermedia, 22 podría calcularle.

—¿Tn?—Asenti y corrí a él, quien me recibió con los brazos abiertos dejando el libro a un lado—¿Por qué luces así? ¿Que paso?

Suspiré y les empece a contar todo, y porque mi apariencia de una nena de entre 13 a 16.

Ben lo tomo tranquilo, pues siempre tomaba todo con calma y con razonamiento.

—Pero tú y yo podemos solucionarlo...—Intente convencerlo. Le había contado lo último con Reginald y estaba de acuerdo en no darle el poder para generar la inmortalidad sin saber sus verdaderos planes.

—Tn...—Me tomo de las manos, ambos íbamos sentados en los asientos del tren del cuál desconozco el rumbo— Nececitamos su ayuda...—Suspire, aunque no quisera molestarlo, tendría que.

—Pero no me recuerda...—Volvi a suspirar. Esto empezaba a causarme estrés.

—Tranquila, se que lo hará, no te estreses, ¿Si?—Asentí.

—¿Tú tienes poderes?—Dicho me miró y asintio. Eso quería decir que yo no tengo su poder.

—¿Tú cuántos tienes?—Me quedé pensando.

—Cuando estaba con Regianald, me teletransporte, también tuve súper fuerza, fui ágil a la hora de lanzar el cuchillo que me abrió la puerta y puede dar marionetas en el aire—Le conté y dicho se quedó pensado—Tengo todos sus poderes, a excepción del tuyo y el de Allison y Klaus.

—Eso todavía no lo sabes—Asenti, en eso tenía razón—Pero tienes uno más que no es nuestro...—Me sorprendí, tenía razón.

Bajamos del tren en un lugar vacío y sólo en el cual a lo lejos se veía un hotel de mala muerte, pero de eso a nada.

Ambos caminamos unas cuadras hasta llegar al lugar, dónde esperamos a que nos atenderían.

—¿Puedo ayudarlos en...?—La mucha de notas cansada y poco contenta con su trabajo

—Una habitación para dos—Ben me miró confundido—Ni estando loca duermo sola.

La chica nos dió la habitación, por suerte Ben traia cambio para poder hospedarla está noche.

—¿Dónde crees que estén ahora?—Le pregunté a Ben quien alistaba su pequeña cama.

—Donde despertaste, deben estar cerca de ahí—Genial, el siempre estaba atento a los mínimos detalles.

—Entonced tenemos que volver...—Termino de alistar su cama y se sentó alado mío.

—Tranquila, estoy contigo y no pasará nada, ¿Si?—Le sonreí para recostarme en su hombro

—La mento en lo que te metí, tengo miedo en que puedas irte otra vez...—No puede evitar un sollozo-A todos les hiciste mucha falta Ben.

—No llores, tranquila...—Senti sus brazos rodeandome, y una de sus manos acariciado mi cabello.

—No quiero volver a estar sola y se que es egoísta pero...—Senti cómo me abrazo más fuerte.

—No lo estarás, mientras yo esté aquí y prometo no irme nunca más—Intente. tranquizarme

—¿Dormirias conmigo?—Vi cómo sonrió y asintio. Mañana veremos cómo solucionarlo.

...

Por otro lado con Cinco

—Tn...-Suspire pesadamente. Así que si tuve una vida y alguien a quien ame y me amo.
Una lágrima recorrió mi rostro, ella intento hablar conmigo, incluso antes de hacer el salto, todo este tiempo amargado y enojado por intentar arreglar todo y ella siempre estuvo para mí solucionando mis errores.
¿Dónde estará? Seguro que aquí no. Empezar una vida de cero, de nuevo.