"El Sótano" © [PJM]

Capítulo 33.

⚠️ Capítulo escrito en el celular, una disculpa por las posibles faltas de ortografía y por la dedicatoria de esta forma. Gracias por la comprensión. ⚠️

Dedicado a: @babyyArmyyz

Maratón Especial "HISTORIAS DEL PASADO." (Regalo de compensación 1)

[Extraído de un Diario local]

"El caso de la joven de actualmente 17 años de edad, Kim Ryuji ha sido cerrado finalmente. Después de una breve investigación esta historia ha dado un giro impredecible al ser recibida una carta a la residencia de los Kim donde se explica de puño y letra de la menor que está se ha ido de su casa por voluntad propia para no volver. Con esta declaración, el Departamento de policía ha decidido finalmente poner fin a este caso... "

Jimin sonríe dejando el periódico de lado con una sonrisa. Jeongyeon le sirve el desayuno para después sentarse o bueno, intentar hacerlo pues su barriguita  ya le estorbaba.

—Hoy te ves de muy buen humor. — Dice la castaña mientras  comienza a comer.

— Tengo mis motivos... — Responde este y vaya que se notaba su buen humor, había que fijarse tan solo en como le hablaba a Jeongyeon. 

¿Cómo no poder estarlo? Era jóven, exitoso, guapo, con mucho dinero y con 2 mujeres a su completa disposición.

Pese a que una estuviera bajo su casa en contra de su voluntad.

— Por cierto... ¿Ya prepararse el desayuno de Ryu? — Pregunta  de pronto. — Más te vale no volver a hacer algo como la última vez. — Dice ahora serio.

"Accidentalmente" jeongyeon había saboteado la comida de su amada salandola al punto de hacerla incomible. Las constantes travesuras de Jeong hacia Ryu ya se habían vuelto habituales. Normalmente la chica se quedaba callada para no causarle problemas a la qu alguna vez fue su amiga pero... Jimin la había descubierto.

Jeongyeon suspira. —Si. Está servido ya... — Dice. — En un minuto bajo a dárselo. —

—Yo voy... — Corta de pronto. — Necesito pasar más tiempo  con ella... Termina de limpiar y después  no me molestes. —

—  Jimin... Pero Prometiste que me llevarías a revisión hoy. — Dice.

— Ve sola, Jeongyeon. Tienes suerte de que no me haya desecho de esa cosa...— Menciona aputando hacia el vientre.—...O de ti. —

Ella lo mira pero vuelve a agachar la cabeza y no pone más objeción. Así eran la cosas y así debían ser sí  quería seguir conservando al menos un lugar seguro para ella y su hijo.

Jimin toma el plato de comida y una taza de café y se dispone a ir hacia el sótano.

Este debe abrir todas y cada una de las cerraduras que ahí había para después bajar. — ¡Buenos días, Amor! — Canturrea mientras  baja las escaleras.

Había mejorado bastante ese lugar. Habia conseguido bajar una cama individual y poder poner un poco de calefacción. Ese era un día especial par él pues se cumplían los primeros 100 días de Ryu estando con él.