Un amor poco común

17

Cuando llegamos a la pista de baile, tome a Billie para que me mirara.

—¿Porque hiciste eso? — Le pregunte riéndome.

Ella también se empezó a reír y antes de que supiera que iba a hacer me tomo de la cintura y me abrazo. Me sorprendió un poco, ya que ella era más de besos, pero le respondí el abrazo inmediatamente. Escondió su cara en mi cuello y empezó a dejar pequeños besos en mi cuello poco a poco.

— Porque me fascina ser tu novia, por eso lo dije. — Me susurro al oído, y sin verla sabía que tenía una sonrisa en su rostro.

Tome su cara para verla y nos quedamos así unos minutos, vi como lentamente empezó a acercar sus labios a los míos, así que me preparé para sentir un beso suyo, que era lo que más deseaba en ese momento. Antes de que nuestros labios se encontraran alguien toco el hombro de Billie. Billie se giro molesta por la interrupción hacía la chica que había tocado su hombro.

— ¿Puedo ayudarte? — Pregunto  conteniéndose.

— Amm... yo... ¿me puedo tomar una foto contigo? Lo siento por interrumpir, pero soy una gran fan tuya.

Billie al escuchar eso cambió su cara y su humor drásticamente y me soltó para abrazar a la chica. Sabía que para ella sus fans eran de lo más importante en la vida, así que fui de nuevo hacia la cocina para que las dos pudieran hablar a gusto.

Me serví un poco de una bebida que no conocía, y me serví un poco más después de probarla. Le eche un vistazo hacia donde había dejado a Billie y ya no era solo la chica, ya había mucha gente a su alrededor, así que supe que eso iba a tardar. 

Tome mi vaso y empecé a subir las escaleras para encontrar un lugar más tranquilo donde esperar a Billie.

La casa era impresionante, era muy hermosa pero sobre todo muy grande. En el segundo piso había tantas habitaciones que se podía confundir con un hotel. En muchas se escuchaban ruidos un poco extraños, así que decidí no abrir ninguna. Fui hasta el final de un largo pasillo y me senté apoyándome en la pared.

Pase algunos minutos en mi celular hasta que noté que había una persona frente a mi. Alcé la vista para ver quien era y lo primero que noté fue el pelo castaño de Matteo.

— Hola de nuevo. — Le dije con una sonrisa en la cara.

— Hola... ¿Que haces aquí? pensé que estabas con Billie. 

— Ah, si, estaba con ella, pero llegaron unos cuantos fans, así que mejor le di su espacio.

— ¿No te gusta ese habiente?

— Si... pero siento que solo estorbo cuando están sus fans, ¿Quieres sentarte?

— Si claro. — Dijo y se sentó a mi lado. — Al parecer esta es nuestra forma de empezar conversaciones, algo parecido paso en el parque cuando nos conocimos.

— Cierto. — Los dos nos  quedamos pensando en lo mismo, y Matteo soltó una pequeña risa. Lo voltee a ver sin saber porque se reía.

El al notar que lo estaba viendo me respondió.

— Lo siento, es que cuando te vi ese día en el parque en verdad me pareciste hermosa, me sigues pareciendo, y no sabes como estuve esperando este día para volver a verte. 

Hasta le pregunte a Finneas que cosas te gustaban, pensaba hacerte un regalo, pero el me dijo que no lo hiciera, pensé que lo decía porque ni siquiera nos conocemos, pero ahora veo porque me lo dijo. — Después de decir eso se quedo viendo al piso por  lo que me parecieron años.

 Cuando volvió a hablar su voz sonaba... triste. — En verdad pensé que algo iba  a pasar entre nosotros, se que es tonto, solo hablamos una vez, pero no se, pensé que  iba a ser algo especial, ya veo que ni siquiera tengo posibilidad.

Cuando termino volteo a ver hacia el lado contrario de donde yo estaba. Y vi como subía su mano para limpiar una lagrima. No sabía que decir, nunca había estado en una  situación como esa, no sabía que hacer, y tampoco sabía si todo eso era real o solo eran efectos del alcohol.

— Yo... — Las palabras no salían, sentía un nudo en la garganta que me impedía hablar. Me sentía mal por Matteo, esa era la verdad. 

Me acerqué más a el y antes de pensarlo más, le di un abrazó. En se volteo para poder abrazarme mejor. Estuvimos abrazados en el suelo por un buen rato, y Matteo solo seguía llorando, ya ni siquiera lo ocultaba, y yo sabía que algo más le pasaba.

— Se que no nos conocemos bien ni nada, pero me pareces buena persona, podemos hablar si quieres.

— Si... gracias. — Creo que eso lo tranquilizó un poco, porque se separó de mi abrazo para limpiar sus lagrimas. — Y perdón por todo eso que dije, no es justo decirlo cuando tu estas con alguien.

— No, esta bien, tranquilo. — Nos quedamos un rato en silencio, pensando en algunas cosas. Podía ser amiga de Matteo, si Finneas se lleva bien con el, yo también puedo, y creo que le hacen falta buenos amigos. 

Voltee hacia las escaleras y vi como un  pelo color platinado subía las escaleras y en mi cara apareció una sonrisa que solo una persona provocaba. Billie.

Cuando llego al piso, le hice señales con la mano para que me viera, venía hacia mi con una gran sonrisa, pero a pocos centímetros de que llegara conmigo, su sonrisa se borró un poco cuando vio a Matteo a mi lado. 

Voltee a verlo y vi que se había quedado dormido. Me paré para no despertarlo y llegue a donde estaba Billie.

— Perdón por dejarte, pero creo que tus fans estaban ahí por ti, no quise estorbar.

— No te preocupes, a penas terminé de saludarlos a todos. — Volvió a ver hacia donde Matteo estaba, y sabía que quería saber que había pasado.

— Estaba esperando a que terminaras de saludar, así que subí para estar en un lugar más tranquilo, y después el llegó y hablamos... bueno el hablo de algunas cosas y después empezó a llorar así que lo abrace y lloro más y después se tranquilizo y... creo que le pasa algo. 

— Si... Finneas me ha dicho que tiene algunos problemas... ¿Lo dejamos ahí o lo llevamos a alguna habitación? 

— No creo que dejarlo aquí sea lo mejor, pero creo que abrir alguna de estas puertas tampoco es buena idea... ¿Sabes cual es su cuarto?

— No... pero hay un cuarto para invitados aquí, tal vez no hay nadie ahí.

Fuimos al cuarto y comprobamos que no había nadie, así que fuimos por Matteo, y después un gran esfuerzo por traerlo hasta la cama, lo logramos.

— ¿Segura que ya no hay fans por saludar?

— Segura, ya me encargue de ellos.

— ¿Entonces podemos seguir con lo que estábamos haciendo?

En vez de responderme con palabras, Billie me tomo de la cintura y por fin me besó.

♥ NOTA ♥

Perdón por no actualizar en ¡10 DÍAS! Les prometo que actualizaré más seguido. Hoy me esforzare por traerles dos capítulos nuevos.

¿Les está gustando la historia?

Si algo no les está gustando o les gustaría que agregara, díganmelo, esta historia es para ustedes. 

L@S AMO!!

GRACIAS POR LEER ESTA HERMOSA HISTORIA.

Camy.★