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Takeshi se acerca a los jóvenes, sonríe al ver la escena de los dos abrazados y apoyándose mutuamente. Con pasos firmes y rápidos llega delante de ellos, se me olvidó mencionar que ahora tenía una ropa de civil. Una camisa blanca de botones, pantalón azul algo apretado, zapatos negros y un reloj en su mano derecha. Incluso Kazuki tuvo que admitir que posiblemente se haría Gay si no estuviera enamorado de su amiga y tan seguro de su orientación sexual.

—¿Tan sexy soy que hago dudar de tú sexualidad Kazuki san?—. Bromeó el oficial ahora vestido de civil.

Kazuki tose avergonzado y Otome hace un puchero, aunque sabía que el oficial estaba bromeando no le gustó el pensamiento de que Kazuki se enamorara de él.

—¡Takeshi san por favor no bromeé con eso!—. Exclamó avergonzado Kazuki

—Ok ok, solo era una broma niño—. Ríe el oficial al ver la vergüenza de el chico—Vamos los voy a escoltar hacia su hogar—. Pone sus manos en los bolsillos de su pantalón bastante relajado como si fuera una persona completamente diferente.

Los dos adolecentes asienten y salen de la comisaría en compañía de Takeshi. No faltó las miradas a su acompañante, incluso Kazuki juro que algunos chicos parecían ¿Enamorados?; No quería indagar más así que empezó a conversar con Otome.
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En el camino se decidió que Otome viviría en el departamento de Kazuki, como una medida de precaución. Los tres ya habían llegado a la puerta de el departamento, Kazuki abrió la puerta y todos entraron cerrando la puerta el último en entrar.

—No es muy grande así que pónganse cómodos—. Va a la cocina, debía preparar por lo menos una cena no había comido nada y adivino que posiblemente tampoco Otome.

Los dos restantes se quedaron en silen, Takeshi fue a la sala y se sentó en el sofá. Otome también fue a la sala pero se sentó en un sillón alejado de Takeshi.

—¿Se quedará a cenar?—. Pregunto la peli rosa al oficial
—No, después de asegurarme que estarán bien vuelvo a la comisaría—. Responde mirando discretamente la sala

Era solo una sola común, no muy decorada y solo tenía lo necesario. Aún así sintió que algo estaba mal, sus instintos nunca fallan.

—Yo iré para ver si Kazuki san necesita una ayuda—. El castaño asiente y ella se para de el sillón llendo a la cocina

Mientras tanto Takeshi miro alrededor sin discreción, se levanta de el sofá y camina sobre varios objetos. Sus ojos se entrecierran al ver el brillo que provenía de un osito de peluche; recoge el oso parecía algo viejo y común como cualquier peluche. Aún así no lo logró engañar.

—Interesante—. Arranco uno de los ojos de el peluche con cuidado de no romperlo demasiado
Entre sus dedos había una pequeña cámara, una tecnología de última generación que pocos se podían permitir. El hombre sin dudar, rompe la cámara solo apretando su mano.

—Takeshi san ya esta la cena...—. se queda en silencio al ver el peluche que le falta un ojo

—Puedo explicarlo—. Pone el peluche de nuevo en su lugar—Solo no entremos en pánico...o molestos—. Mira al joven algo nervioso después de todo rompió algo de su propiedad
Takeshi solo suspira y asiente. Los dos fueron a cenar en silencio, él de ojos dorados estaba pensando que haría una cámara en un peluche y porque vigilar a un adolescente común y corriente.

—Kazuki san—. Abre su mano y muestra la cámara rota que descansaba en la palma de su mano— esto lo encontré en uno de los ojos de el peluche—. Lo mira con seriedad, no mentía y algo como esto era un asunto serio

—¿En ese peluche?—. La chica se sorprende— ¿Ese de color blanco con un corazón?—. Pregunta con cautela

—Sí—. Mira a la chica dejando la cámara en la mesa— ¿Conocen quien les regaló esto?—. Mira a los dos juntando sus dos manos en la mesa
La cocina se sumó en silencio, si sabían de quién era ese regalo o mejor dicho quien lo entrego. Kazuki era el más inquieto, había evidencia en sus ojos pero no era posible para el creer.

—Ese peluche...—. dudó en informar, en su mente no cabía que su hermanita hiciera algo como eso.

—Es necesario toda la información posible porque eso—. Señala a la cámara rota— es un delito grave, además de no saber cuánta información conoce

—Mi hermana me regaló eso—. Suelta un suspiro pesado— yo no tenía ni idea...

Otome abraza a Kazuki, el peli negro devuelve el abrazo a su interés amoroso. Takeshi se queda reflexionando, llegó a la conclusión de que posiblemente esté departamento no sea seguro y...tenía un sospechoso más pero por ahora no diría sus sospechas.

—Este lugar no es seguro, volvemos a la comisaría—. Declaró el detective, parándose de la mesa

—Entendido—. Kazuki se levantó igual muy nervioso de lo que esto podría significar para el caso

—Todo estará bien—. Le murmura a Kazuki, dándole una sonrisa tranquilizadora

Los tres volvieron a la comisaría, al parecer no había más lugares seguros que una estación de policía. Al llegar Takeshi fue directo hacia el sargento Miyamoto, tenía que informar el reciente descubrimiento y una de sus sospechas.
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Este capítulo es demasiado corto a mi parecer, aunque no me nació inspiración para continuar lo. En fin no se si decir que retrocedió o avanzó todo. Pero creo que lo de la cámara ¿Es un pequeño avance?.

No tenía planeado poner una cámara ni nada parecido, pero solo empecé a escribir y boom apareció esa escena. Está vez sentí los diálogos algo...forzados, no se si solo es mi imaginación o ustedes también lo notaron.

Bueno...disfruten de la lectura.

Camino Diferente #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora