XI

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Prisión XXX, 3:00 pm

El grupito de viejos entro a la prisión, su primera fase fue entregar todas sus pertenencias que tenían a mano y cambiar su ropa por la de prisión. Le hicieron unos exámenes generales, tomaron fotos con su número de prisionero y celda. Después de terminar todo eso los guardias de la prisión lo llevaron a su área, aunque por el camino notaron sutiles diferencias ya que estaban seguros que el camino hacía las celdas de los condenados a muerte era diferente.

—¿No estamos tomando el camino equivocado?—. Preguntó frunciendo el ceño estando seguro de que su memoria no fallaba.

—No, su área está aquí no hay error—. Contesto con frialdad siguiendo su camino sin mirarlos.

Ellos solo podían callarse y seguirlo, aquí no tenía el mismo poder que allá afuera. Aquí simplemente eran cómo pescados en la tabla de cortar, esperando su muerte sin poder hacer nada. Algunas se arrepintieron pero ya era demasiado tarde, otros no les importaba y pensaban que sus acciones eran correctas. No importa cuánto estuvieran pensando al final llegaron a su aérea, el guardia no sabían si fue intencional o no los dejo en el comedor.

—Vaya vaya que tenemos aquí—. Uno de los presos que era alto y de constitución fuerte fue el primero en hablar acercándose a ellos y con los brazos cruzados—son nuevos novatos—. Declaró mirándolos con burla.

Los otros prisioneros solo rieron al escuchar sus palabras, pronto los rodearon en un círculos. El grupo solo podía temblar al estar rodeados, en su corazón ya estaban entrando en pánico. Un prisionero se acercó al alto y fuerte que fue el primero en hablar, susurrándole información al oído, su mirada al grupo pronto se torno peligrosa.

—¿Es así?—. Mirando con frialdad al grupo, su tono aunque sonaba tranquilo traía peligro.

—Sí—. Él miro al grupo con asco- mis fuentes son confiables, ellos son violadores primero violaron a un niña durante años y después a otra muchacha-. Afirmó sin hablar demasiado alto o bajo, solo el sonido perfecto para que todos lo oigan.

Cada uno de ellos miraron al grupo con tintes asesinos y de odio, ellos podían ser de la peor calaña pero algo que no iban a aceptar eran a los violadores. Los de ese tipo eran los más odiados de la prisión, aunque algunos tenían un par de ideas de el porqué ellos están en su área su odio era más fuerte cómo para darle importancia a los motivos ocultos de los altos mandos de la prisión.

—Lleven los al patio les daremos su lección—. Sin importar las súplicas de el grupo ordenó con frialdad que los llevarán hacia el patio.

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Patio de la prisión 3:50

El grupo de hombres de mediana edad estaban atados de las manos en los postes, completamente desnudos. Algunos prisioneros silbaban conociendo la situación en general, otros preguntaban la situación. ¿Y los guardias?, Hacían la vista gorda de lo que pasaba.

—Hola amigos bienvenidos a nuestro nuevo show—. El prisionero que informó al primero en hablar al grupo, hizo una reverancia exagerada mientras decía esas palabras— en este Show hay unas cuantas reglas—. Ríe al ver esos viejos temblar de miedo- 1 solo pueden follar los por turnos, dos no pueden follar a los mismos y tres ¡Serán de 5 grupos por tiempo!

Todos vitorearon menos los viejos que estaban totalmente aterrados, el prisionero que aparentemente hacía de presentador los calmó. Y prosigue con su discurso.

—Calma amigos aún no digo cómo ganar—. Su sonrisa se vuelve siniestra— ganarán los que mejor hagan gemir y pedir clemencia a esas putas—. Señalando a los viejos cómo si sus palabras fueran lo más normal—se puede todo tipo de posturas y métodos, pero lo principal es entretener—. Aplaude riendo regocijante de la miseria que ellos pasarán.

Camino Diferente #PGP2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora