cuarenta y nueve

5.3K 638 33
                                    

Ya terminé de escribirlo, ¿que les interesa saber en el próximo capítulo?

─────────────────────────

JiMin se movió en su cama con pereza cuando su celular sonó. Maldita sea, había sido un día cansado y no podía dormir tranquilo.

Se sentó con pereza, estirando su mano para alcanzar su teléfono. Cuando quiso contestar, la llamada se colgó.

El peli-naranja hizo una pequeña mueca, tallándose un ojo mientras prendía su teléfono, bajando el brillo de su teléfono.

─ ¿A quien se le ocurre llamar a las dos de la mañana? ─ Murmuró con desconcierto, y cuando su teléfono se encendió otra vez quiso gritar de frustración.

Con ganas de lanzar el teléfono a la pared (cosa que siempre sentía cada vez que sonaba la alarma) contesto la llamada.

─ ¿Quien es y por qué me molesta a esta hora? ─ Casi maldecio, a través de la línea se escuchó una respiración muy notoria.

¿Acaso estaba respirando por la boca?

JiMin estaba a punto de colgar al no tener una respuesta, sin embargo la persona contraria hablo.

─ JiMin, soy TaeHyung. ─ El peli-naranja detuvo sus movimientos, escuchando atentamente al contrario.

Se preocupo en cuanto escucho el llanto de TaeHyung.

─ Tae, ¿que pasa? ¿por qué lloras?

─ Por favor ven al hospital. ─ JiMin se levantó rápidamente, ignorando el frío y acercándose a su ropero, esperaba que no fuera una emergencia.

─ Voy de inmediato, pásame con JungKook. ─ Dijo, mas el llanto del menor se intensificó más.

─ JiMin, JungKook está en el hospital, por favor ven.

El peli-naranja soltó su teléfono inconscientemente, ¿JungKook estaba en el hospital?

Sintió sus piernas flaquear, y cayó en rodillas al piso mientras sus lágrimas bajaban por sus mejillas. No, se negaba a creer que de verdad JungKook estaba en el hospital.

No, posiblemente él, lo había malinterpretado, si, de seguro era eso.

Recuperando los ánimos tomo de nuevo su teléfono, terminando de ponerse su casaca.

─ Bien, estoy yendo ahora, ¿que tiene JungKook? ─ JiMin salió de su habitación, sintiéndose confundido cuando vió a su madre acercándose preocupada a él.

─ Lo han acuchillado JiMin, está en urgencias, ha perdido mucha sangre y todavía no nos dan noticias. ─ El peli-naranja sintió como el alma abandonaba su cuerpo de nuevo.

Sintió sus piernas debilitarse, pero antes de caer sintió como alguien lo sujetaba por la cintura, sosteniendolo.

─ Súbelo al auto, ya. Vamos al hospital. ─ La voz de su madre fue firme, pero JiMin ni siquiera pudo reaccionar. No quería creer que su mejor amigo estuviera ahora mismo en el hospital.

YoonGi asintió, logrando tener sus emociones controladas y llevando a JiMin al auto.

El pelinegro estaba sorprendido, JiMin no estaba llorando, mas bien, estaba en un tipo de shook momentáneo. La señora Park estaba preocupada, no solo por la reacción de su hijo, sino también por JungKook.

YoonGi se sentó en los asientos traseros, no sabía que decir en situaciones como esta, y menos con un JiMin que no emitía palabra alguna.

─ Hey, JiMin, ¿estás ahí? ─ El peli-naranja asintió con lentitud, mirando alguna parte del auto vacía.

Riquillos presumidos [KookTae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora