dieciséis

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─ Puedes irte, te llamaré para que nos recojas, gracias Choi. ─ Dijo serio JungKook, alejándose del coche.

JiMin por su parte estaba con ambos jóvenes, comentadoles entusiasmado sobre lo que ambos necesitarían para su curso. Roseanne lo miraba con mucha curiosidad, mientras que TaeHyung estaba perdido en su mundo, pensando en quien sabe que.

─ Bueno, ¿Por dónde empezamos? ─ Pregunto una vez llegó con los demás, captando rápidamente la atención de TaeHyung, y los demás por supuesto.

─ Cuadernos, de preferencia los de anillo, les tengo un cariño especial, ah, y con hojas un poco gruesas, que después se traspasa el plumón si es que desean decorar. ─ JiMin tomo las muñecas de TaeHyung y Roseanne, jalando de ambos hacia una tienda.

JungKook rodó los ojos, porque su amigo era tan observador y cuidadoso con los pequeños detalles, que a veces no sabía si era una virtud o un defecto. Aunque se inclinaba más a qué ers una virtud.

Siguió con pasos perezosos a los tres chicos, quienes veían diferentes libretas y su textura, o al menos eso hacían JiMin y Roseanne, ya que TaeHyung estaba viendo los lapiceros y resaltadores que estaban al lado.

Una pequeña sonrisa se asomó por sus labios, acercándose al chico castaño quien comparaba dos estuches de resaltadores.

─ ¿Que haces? ─ Se interesó JungKook, colocándose detrás de TaeHyung, asomando su cabeza por el hombro del chico.

TaeHyung volteó un poco su mirada, encontrándose con el rostro de JungKook muy cerca del suyo. Por puro impulso se separó de el tan rápido como si fuera fuego.

JungKook solo soltó una suave risa, que lograron calmar al castaño.

─ Mmm, estaba viendo estos dos paquetes de resaltadores, y no sé cuál usar. ─ Susurró, mostrándole ambos paquetes.

JungKook se fijó en ambos paquetes, notando que la diferencia era el tono, el de la derecha era de color pastel, mientras el de la izquierda tenía colores más fuertes.

─ Pues si no te decides llévate ambos. ─ Comento simple, alzando los hombros, restándole importancia al problema que a su parecer tenía una solución fácil.

─ ¿Ah? No, no puedo hacer eso, vas a gastar más, y- ─ JungKook lo calló, colocando su dedo índice en los labios del castaño, indicando que se callara y el chico así lo hizo.

─ Por el dinero no te preocupes, JiMin y yo pagaremos todo y ambos tenemos dinero de sobra, así que, si tú quieres ambos, te los compro, después de todo, será para que estudies, no le veo problema.

Jeon retiro su dedo, posando sus manos detrás de su espalda. TaeHyung alzo una ceja, y lo miro algo confundido.

─ Juraría que este no es el mismo JungKook con el que me topé la primera vez ─, el azabache frunció el ceño, mostrándose un poco indignado.

─ Bueno, si, tengo mi lado egoísta, pero si tú quieres estudiar, no puedo privarte ese deseo y derecho. ─ Trató de ser comprensivo, mirando hacia otro lado con tal de evitar la mirada del castaño, que seguía sin creerlo.

─ Bueno, también estás muy amable, ¿Qué ha cambiado? ─ JungKook suspiró, pasando su mano por su nuca, un poco ansioso.

¿Que debía responder? Ni el mismo sabía, tampoco podía decirle que simplemente era así, podía tratar mal a alguien, y al día siguiente tratarlo bien y como si nada. Era raro si, pero bueno, así era él.

─ ¡Hey! ¿Por qué hay tensión aquí? Ven, toma esto, lo vas a necesitar. ─ JiMin le extendió una pequeña cesta de la tienda, que era de color rojo.

Riquillos presumidos [KookTae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora