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El tiempo lentamente y sin esperar a nadie fue pasando, día tras día, mes tras mes, estación tras estación, año tras año hasta llegar al tiempo actual. Sizhui estaba por cumplir 16 años y, gracias a la gran educación que Madam Wen le otorgo, tenia muchas habilidades que eran difíciles de ver en un neith esclavo común. Desde leer, tocar el piano, el guqin, la flauta, el canto y matemáticas, todo lo que Sizhui quisiera estudiar su tía Wen se lo concedió aun a pesar de las quejas que Wen Rouhan pudiera tener al respecto.
En cuanto a Lan Zhan, la señora Wen le permitió ver a su cachorro cada vez que el señor Wen salía de la hacienda, sus vecinos le ayudaban en esto avisándole cada vez que vieran salir al señor para que el pudiera ver a su hijo. En cuanto a su libertad, se debe decir que el éxito ha sido prácticamente nulo, a pesar de que trabajaba día y noche como herrero no conseguía realmente el dinero, y esto en parte se debía a que cada vez que tenia el monto que le pedían, Wen Rouhan le decía que las cosas habían cambiado y que el precio había subido, ante esto lan wangji no podía hacer nada más que maldecir al hombre el silencio.
Su relación padre e hijo a pesar de las pocas visitas era muy hermosa, Sizhui esperaba ansioso siempre las visitas de su padre. cuando conseguían juntarse aprovechaban cada segundo que pudieran tener juntos, Lan Zhan a veces le llevaba un nuevo conejo, los cuales su vecino le guardaba cada vez que uno se veía por el bosque, le llevaba ropa o cintas que le recordaban a su pequeño cuando salía al mercado. Sizhui por su parte le deba postres que el mismo cocino, le contaba de sus clases o las cosas que había hecho, a veces le cantaba o le leía poemas que había leído en el ultimo tiempo. Por su puesto otra cosa que hacían era hablar de wei ying, a Sizhui le encantaba escuchar de su madre, sus travesuras o su valentía, le hacia sentir que lo conoció y que lo acompañaba, aunque sabía que no era lo mismo.
Sizhui, tal como su madre predijo, se presentó como un omega. tenía clara su situación, sabia que significaba tener las orejas grises de conejo sobre su cabeza, sabia porque podía ver poco a su padre y porque no tenia con él a su madre, sabia porque el señor Wen lo trataba con rechazo y la razón de las atenciones que le daba su tía Wen. De pequeño solía llorar pidiéndole a su padre que lo llevara con él, le contaba como Wen chao lo molestaba y como castigaban a Wen xu por defenderlo, le dolía que lo separaran de su papá, su abuela Wen lo jalaba para tratar de hacer que soltara su agarre en las piernas de su padre. Mientras fue creciendo se empezó a dar cuenta de todo, se dio cuenta del dolor de su padre cada vez que le pedía ir con él, de como siempre estaba más delgado que antes por no comer pensando en ahorrar cada uno de los wones, así que cada vez comenzó a aparentar más, le ocultaba cualquier burla o desprecio hacia su persona y se centraba en las cosas buenas tratando de hacerle creer que era feliz en esa casa.
La convivencia dentro de la casa no era la mejor, Madam Wen le tenia un cariño especial a Sizhui, más aún desde su presentación. sus dos hijos eran beta y alfa, pero ella siempre deseo educar a un omega y ahora se le presentaba la oportunidad. Wen Rouhan por su lado, le molestaba la forma en la que su esposa trataba al chico, si le tenía cierto aprecio al neith, lo vio crecer y a decir verdad era muy talentoso, pero se parecía mucho a su madre solamente que con unos brillantes ojos dorados y eso le molestaba, era como un recuerdo constante de lo que le robaron.
Los hijos de los Wen eran un cuento aparte, el mayor, Wen xu, un beta de ahora 31 años, este siempre le tuvo aprecio al pequeño omega que vivía con ellos desde que nació, lo quería como a un hermanito y le encantaba tener su compañía. El menor, Wen chao, un alfa de 26 años, creció teniéndole odio, le molestaba las atenciones que recibía de todo el mundo pues, para él, Sizhui solo era un esclavo omega que no tenia nada de especial, por lo que se encargaba de hacer su estadía en casa lo peor que pudiera.
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Neiths
FanficImagina un mundo donde tu apariencia puede definir tu vida. Un mundo donde todo puede cambiar en una sola noche. Un mundo donde tu opinión y tu vida podría no valer nada para los demás. Un mundo donde te puede tocar ver sufrir a tu familia sin po...