ღCHLOEღ
El concierto había llegado a su fin por ende el lugar que hace un rato había estado hasta el tope de personas ya estaba vaciándose lentamente.
Voltee para mirar a los chicos, me había percatado de la buena resistencia que tenía Aaron para beber, pero no podía opinar lo mismo de Marcus, que muy por el contrario ya estaba demasiado borracho.
—Hey, ni creas que conducirás tu— Chad se dirigió a Aaron, mientras que este ultimo buscaba las llaves desesperado en los bolsillos de sus vaqueros.
—Pero si no estoy borracho— Levantó una ceja.
—Pero bebiste y vamos con Chloe— Chad terminó de responder y se sacó las llaves del pantalón enseñándoselas a su amigo que seguía buscándolas.
—¿En qué momento...
—Hace un rato, sabía que querrías conducir— Me guio hasta la puerta del copiloto y la abrió.
Le agradecí en un gesto suave y me senté.
Aaron ayudó un poco a Marcus para poder subirse a la parte de atrás.
Finalmente Chad sentó detrás del volante e hizo contacto con la llave rápidamente poniendo el auto en marcha. Me quedé mirándolo unos minutos porque no tenía idea que Chad supiera conducir, y tenía que destacar lo atractivo que se veía haciéndolo.
—Sigue derecho, yo te avisaré en que calle doblar— Aaron iba indicándole.
—¿A dónde vamos?—Marcus preguntó, articulando exageradamente.
—Deberíamos haberlo ido a dejar a casa, así de borracho no disfrutará nada— Aaron reclamó.
—Pero si siempre se emborracha de esta manera, luego vomita y ya vuelve a su estado casi normal—Respondió desinteresadamente Chad quien iba con su vista fija en la calle.
Traté de mirar por la ventana lo que duraba el trayecto pero se me hizo una tarea difícil, contemplaba casi inconscientemente a Chad.
—Ahora, a la derecha— Aaron indicó a lo que nuestro guapo conductor acató.
Por donde doblamos habían bares y pubs, señalados con carteles neón de todos los tamaños. Alguna que otra persona parada por fuera fumándose un cigarrillo o besándose con alguien que seguramente acababan de conocer. Después de fijarme en estas cosas miré a Chad de soslayo, comencé a fijarme en cada detalle como en su gesto relajado sujetando el volante, en sus ojos, su boca... —Si sigues mirándome así, tendremos un accidente—Hizo que me sobresaltara.
Mis ojos se abrieron más de lo normal y sentí mis mejillas arder como nunca antes.
—¿Cómo te estoy mirando?— Respondí muy nerviosa pero creo que pude disimularlo.
—Como si quisieras besarlo— Se adelantó para responder Marcus.
—¡Marcus ya callate!— Aaron golpeó la cabeza del chico.
Reí suavemente haciéndome la desentendida y miré a los chicos por el espejo para luego fulminar con la mirada a Chad pero, él solo me dedicó una sonrisa socarrona y divertida.
Preferí sacar mi celular del bolsillo.
Abrí mis redes sociales y casi todos mis seguidos habían subido historias nuevas, me puse a revisar las primeras y una de ellas era Regina.
Presioné rápido para ver que era lo que estaba haciendo porque últimamente no habíamos hablado mucho.
Una foto en la terraza de su casa de veraneo, ella me había dicho que estaría allí así que no me sorprendí hasta que me di cuenta que en una esquina se distinguía levemente una mano que rodeaba su cintura.
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Volviendo a Amar
Teen FictionUn chico le romperá el corazón mientras que otro le enseñará lo que es el amor. Chloe tiene una solitaria vida en Oregón, sus padres no tienen tiempo para ella y decide irse de vacaciones con su hermana. Serán unas vacaciones distintas, con sorpres...