Las últimas semanas habían sido las más cansadas de su vida, entre el juicio y estar al pendiente de todas las cosas relacionadas al trabajo no había encontrado descanso. Había visto a Mark 5 veces en el mes, 5 días de 30, habían estado hablando y mandando mensajes incluso haciendo videollamadas mientras Jackson se encontraba en la oficina.
Para la buena suerte de todos el juicio había sido un éxito, habían arrestado a los 3 sujetos y no había posibilidades de pedir libertad condicional hasta dentro de 40 años, cuando Yugyeom habló de otras posibles muertes no se imaginaron que serían 5 muertos más, mas aparte delitos como, tráfico de drogas y tráfico humano, fraude, secuestro, etc. Se podía decir que estaban tranquilos ahora que no podrían lastimarlos.
Las cosas iban bien para Jackson ahora que había cerrado ese mal capítulo en su vida, su única queja era no poder ver a Mark, entiéndanlo, a veces sólo lo veía y quería abrazarlo y pasear con él pero no podía por la cantidad de cosas por hacer. Ese mes se habían conocido más que nunca entre tantas conversaciones, sentían que ya no había aspecto de la vida del otro que no conocieran y eso les gustaba, los hacía sentir especiales.
— ¿Crees que Jackson pueda descansar el fin de semana?.
— No lo sé, dijiste que casi terminaba su trabajo, tal vez para el fin de semana se desocupe.
— Pregúntale por favor, es de vida o muerte.— Jinyoung alzó una ceja divertido.
— ¿Por? — Mark lo miró mal.
— Le voy a pedir que sea mi novio, quiero que el fin de semana vayamos a esas cabañas que dijo que quería visitar.— suspiró.— Se ha vuelto difícil vernos y no he podido hacerlo.
— ¡No puedes pedírselo!.— Gritó asustando a Mark.
— ¿Por qué? ¿Ya no le gusto?.— preguntó en tono desanimado.
— ¡No! ¡Digo sí!, pero el también quiere pedírtelo.— confesó.
— ¿De verdad?.— Sonrió.— Entonces que gane el mejor.
— Eres de lo peor.
— Tu lo eres, le diré que me dijiste.— bromeó.
Luego de la pequeña visita de Jinyoung se apresuró a bañarse y arreglar un poco su casa para poder hacer su videollamada con Jackson como todas las noches. Estaba feliz de que el caso se hubiera cerrado y ahora tuviera una preocupación menos, la semana anterior habían pasado la tarde juntos y Jackson se notaba cansado, le ofreció que se durmiera un poco pero el se negó porque quería que pasaran tiempo juntos, desde ese día había pedido que durmiera más temprano y comiera bien, por eso hacían una videollamada antes de que este durmiera.
Una vez en su cama presionó el botón de llamada y esperó dos timbres luego su pantalla mostró la imagen de Jackson también en pijama en su cama son una sonrisa.
— Hola, ¿a dónde vas tan guapo?.— Jackson bromeó al ver la pijama de rayos que Mark tenía puesta.
— A una cita.— dijo borrando la sonrisa que tenía Jackson.
— Nadie va a una cita en pijama de rayitos.— dijo con fastidio.
— Si tu cita es una pijamada sí, aparte el chico es guapísimo y estoy seguro de que le gustan mis pijamas.— soltó alegre.
— ¿Si? ¿Y por qué no te vas antes de que se te haga tarde?.— cuestionó celoso.
— Ya estoy hablando con mi cita, ¡que tonto!.— soltó una risa haciendo que Jackson sonriera.
— Dijiste guapísimo...— Mark asintió.— ¿Quiere decir que soy mas guapo que Jinyoung?
Mark soltó una carcajada. — ¡Deja ir eso ya! Si mal no recuerdo dijeron que yo dije que tú eres perfecto, eso quiere decir que lo eres. Mucho.
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Nunca Más // Markson.
RomanceJackson es un "exconvicto". Mark el chico que lo encuentra borracho al borde de la muerte -según él-.