Hoja en Blanco -KookV- [omegaverse]

09

Aún te sigo soñando.

Había tenido un día horrible, pero también bastante agotador.

Resulta que estar en un equipo de futbol y ser el capitán del mismo, no era algo sencillo. Aún más, cuando este perdía y se veía en la obligación de sacar a su equipo adelante, tanto física, como emocionalmente.

Le gustaba jugar al futbol, podría decirse que era un pasatiempo bastante entretenido. Aún así, no era tan sociable como aparentaba.

Él era una persona bastante complicada algunas veces. Acostumbraba a ilusionar a las chicas, de preferencia betas. Discutía continuamente con sus padres, maestros, tíos, con su primo y con su "único" hermano. También tomaba alcohol siendo menor de edad, gastaba dinero en cosas innecesarias y salía a fiestas para luego volver a casa apestado en alcohol. Su presentación "temprana" tampoco ayudaba; esta había sucedido a la edad de 8 años y no había ayudado mucho en su personalidad.

Él pertenecía a una casta, un rango, que ya no se veía en la actualidad. Solía causar temor con tan solo verlo a los ojos. Portaba un nivel de dominación elevada y era muy intimidante estar cerca suyo; o eso demostraban las personas a su alrededor.

Muchos solían llamarlos bestias, animales salvajes. Y realmente no se alejaban mucho de la realidad.

Las personas que pertenecían a esta casta, tenían que aprender a controlar la bestia que vivía dentro de ellos, ya que muchas veces este solía tener un control completo de su cuerpo. El ser guiados y cegados por sus instintos era muy peligroso. Muchas veces cometían acciones de las cuales ni se imaginaban.

Él a la edad de 15 años, ya se podía caracterizar como una persona arrogante.

Con más control de si mismo, consiguió ser capitán de su equipo no porque quisiera, sino porque sus compañeros así lo decidieron y él no entendía el por qué.

Solo contaba con dos o tres amigos. El resto de las personas les daba igual. Es mas, ni siquiera le importaban.

A causa de su rango, el amaba estar en silencio. Le gustaba estar solo, pero siendo uno de los chicos mas nombrados en su colegio, era algo complicado. Era bastante inteligente o eso decían sus notas. Pero dentro de todo, tenía un carácter sumamente complicado e irritante. Su mal humor muchas veces salía a flote y generaba que se desquitase con cualquier persona que se encontrara en su campo de visión.

No era algo que él pudiera controlar, por esto siempre intentaba estar solo. Nunca sabía cuando la bestia podía salir y atacar.

Era un clima caluroso, el sol se encontraba en su máximo esplendor. Apenas y podía sentirse la tenue brisa que movía la copa de los árboles con sutileza.

Luego de bajar del auto negro, pues recién había llegado de la escuela, comenzó a caminar hacia el jardín trasero de su casa. No tenía ánimos de encontrarse con su madre y el cuestionario de preguntas acerca de cómo había estado su día y que era lo que había hecho.