Xoxo, Rose [Libro 1]

11 | Swingers

Reginald Barbrow ha subido una nueva imagen a su cuenta de Instagram en la que se pueden ver dos breakfast martini decorados con jengibre. En el pie de foto ha puesto: "Me siento feliz de poder pasar tiempo contigo otra vez". Millie, Christine y Travis fueron de los primeros en dar me gusta a la foto.

A pesar de esto, algo que nos pone felices es que Regi está compartiendo un poco más con su hijo Christ. ¿No es eso bonito? Sería aún más bonito que Christ tuviera redes sociales, pero de momento solo podemos soñar.

@GossipTV

🌺🌺🌺

—¿Rose? ¿Rose Li? —dijo el chico asiático. Parecía sorprendido, muy sorprendido de ver a Rose en el hotel, saliendo de un ascensor, con el cabello húmedo...

Claro, comprendía su sorpresa y lo que aquello podía parecer, al menos a simple vista. Kit miró a Rose de reojo, podían explicarle la situación a ese chico, si ella quería, claro.

—Hola, Drew —respondió ella con una sonrisa incómoda en el rostro—. ¿Qué tal estás? Yo estoy estupendamente, mejor que nunca.

La otra chica miró a Rose de arriba abajo, como si lo pusiera en duda. Kit se sentía como si estuviera en un juego bádminton, con el volante pasando de un lado a otro, aunque en ese caso eran las miradas las que iban de Rose a esa chica, de esa chica a Drew y luego de nuevo a Rose.

—Estoy bien, sí... Con Bella. —Le dio un codazo a la muchacha y le hizo una seña, esta, giró la vista y alzó la mano en modo de saludo.

—¿Qué tal, Rose? —dijo con voz de fastidio.

Kit quería tirar de la mano de Rose y sacarla de allí, era una soberana tontería sostener una conversación con una persona sin un ápice de educación y un tonto que la miraba como si hubiera organizado un suicidio en masa por salir de un ascensor con el cabello húmedo en compañía de un chico.

Era el siglo XXI, no la época victoriana.

—¿Y tú eres? ¿Su novio? —soltó Bella entonces y Kit no pudo evitar abrir y cerrar la boca sin emitir ningún sonido. Iba a decir que sí, para quitárselos de encima, pero no estaba seguro de si sería una buena idea, recordaba el gas pimienta de Rose, no iba a arriesgarse a que le rociara de nuevo la cara o a que sacara alguna otra cosa ¿una pistola Taser tal vez?

—Oh, no, claro que no —dijo ella con una risita y Kit sonrió amigablemente a los dos extraños—. Por supuesto que no. Él es mi amante.

Kit se sonrojó y comenzó a toser. Drew abrió la boca y Bella alzó una ceja.

—Me llamo Christopher; Kit para los amigos —dijo él, reaccionando al fin, tomando la mano de Rose. Estaba helada—. Es un placer conocerlos.

—¿Eres un hombre casado? —preguntó Bella con incredulidad y Kit se sintió palidecer. Un adúltero, ni más faltaba.