𝔈𝔫 𝔢𝔩 𝔮𝔲𝔢 𝔰𝔢 𝔯𝔢𝔩𝔞𝔱𝔞 𝔩𝔞 𝔪𝔞𝔫𝔢𝔯𝔞 𝔢𝔫 𝔩𝔞 𝔮𝔲𝔢 𝔩𝔬𝔰 𝔳𝔦𝔨𝔦𝔫𝔤𝔬𝔰 𝔞𝔣𝔯𝔬𝔫𝔱𝔞𝔫 𝔩𝔞 𝔭𝔬𝔰𝔦𝔟𝔩𝔢 𝔞𝔪𝔢𝔫𝔞𝔷𝔞 𝔮𝔲𝔢 𝔰𝔲𝔭𝔬𝔫𝔢 𝔩𝔞 𝔖𝔞𝔫𝔱𝔞 𝔄𝔩𝔦𝔞𝔫𝔷𝔞 𝔭𝔞𝔯𝔞 𝔢𝔩𝔩𝔬𝔰.
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La Santa Alianza no solo era un tratado extremadamente joven, sino también que comenzó como la unión bélica de tres nuevos reinos: DunBroch, Corona y Arendelle. Corona necesitaba posicionarse en el mapa mediante enfrentamientos que infundieran temor en los reinos vecinos, DunBroch quería desterrar a los insistentes bárbaros y romanos que deseaban sus tierras y el fruto de estas; por otro lado, Arendelle estaba en un lugar delicado a causa de la muerte repentina del rey Runeard en su enfrentamiento con la mística tribu de la gente del sol, provocando así que las Islas del Sur rápidamente planearán ataques para conquistar las indefensas tierras de Arendelle. A pesar de su inmensa lejanía, la magia que estos tres reinos albergaban los unieron rápidamente, también lo hizo la rápida amistad que se formó entre los gobernantes de aquel entonces, el huérfano rey Agnarr, quien conocía el potencial de la magia de trolls, el mayor de ellos, el recién nombrado rey Fergus, quien había sido educado para derrotar vikingos y masacrar romanos; y el tranquilo príncipe Frederic, quien comprendía la magia del sol y experimentaba con ella con la ayuda de los alquimistas de su patria.
Se deshicieron de la amenaza de las Islas del Sur con mucha facilidad, la armada de Corona, los trucos de Agnarr y la estrategia de Fergus, todo ello marcó desde un inicio su absoluta victoria. Una victoria tan firme que colocó a las Islas del Sur en una posición de sumisión durante muchísimos años. Colocó en el salón de la fama a Corona y a sus guerreros, e intimidó a varias tribus bárbaras y contuvo por un tiempo a los romanos. Pero cuando los hombres se casaron, cuando las guerras se habían olvidado, cuando por el mundo se extendió la noticia de que el primogénito de Corona había sido secuestrado y que el pequeño futuro soberano de Arendelle había recibido el inmediato rechazo de la Santa Sede los ataques volvieron en contra de la alianza de las tres naciones.
Fergus fue obligado a vivir su vida en el campo de batalla por muchos años, dejando a su esposa sola en su reino, encargada de sus vástagos y de todos los pueblerinos; Frederic no recuperó el respeto de su gente hasta que la mujer que había secuestrado a su niño fue colgada delante de todo el mundo. Y la reina de Corona, Arianna, luego de que se le concediera la regencia de Arendelle por la repentina muerte de ambos gobernantes, aceptó el compromiso entre el pequeño Anne y la menor de las princesas de las Islas del Sur, haciendo así que los pueblos sureños se sumarán a la causa de DunBroch. No había sido hasta tres años atrás, cuando finalmente Murdoch tuvo diecisiete años, que finalmente los enemigos del territorio britano fueron dejados en paz.
La Santa Alianza se había mantenido con fuerza sobre el resto de naciones gracias a los rumores que los soldados asustados no dejaban de expandir por sus patrias: El nuevo rey de Corona tenía un poder que podía o curar cualquier herida o quemar tu carne hasta los huesos, al nuevo rey de DunBroch le seguían eternamente fieros osos que solo obedecían a sus palabras, y los espíritus de los bosques habían bendecido sus flechas de tal manera que jamás fallaban sus tiros, la reina de las Islas del Sur había experimentado con la brujería de tal manera que hasta el mismo diablo le temía, y, el peor de todos, el joven y sanguinario rey de Arendelle creaba a su antojo un hielo que resistía todo metal y todo fuego, formaba eternas nevadas y congelaba toda tierra que pisaba. Los nuevos soberanos eran el temor de unos países que no comprendían cómo era que cristianos habían conseguido una magia que se asemejaba tanto a los dioses paganos que tanto despreciaban.
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𝕰𝖑 𝕵𝖚𝖊𝖌𝖔 𝖉𝖊𝖑 𝕽𝖊𝖞. [HiccElsa]
FanficLuego de su muerte, la memoria de Estoico se enfrenta a las consecuencias de sus errores: el abandono de un niño que le necesitaba, el nulo reforzamiento de una alianza que mantenía a su pueblo a salvo, la falta de respeto a las promesas que dedicó...