Bölum 8

3.8K 379 16
                                    

Días después

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Días después

-La niña que nunca debió nacer...

Aquella niña se aferraba a sí misma en el rincón de aquella casa maloliente, tratando de buscar refugio en sus propios brazos mientras aquel hombre que permanecía de pie detrás de ella agitaba un cinturón desgastado.

-La niña nacida del pecado.

¨~

-Harika ¿Me estás escuchando?

La rubia salió de su ensoñación al escuchar a Mihrimah hablarle, así que rápidamente sonrió mirando a la Sultana del sol y la luna quien le miraba preocupada.

-Lo siento Sultana, me perdí en mis pensamientos del pasado -respondió sonriendo tomando la mano de la Sultana- no hay nada de qué preocuparse.

-¿Aún no estás lista para contar sobre tu familia? -preguntó sosteniendo la mano de Harika recibiendo un apretón por parte de ella- siempre me he preguntado sobre las familias de todas las concubinas del Harén antes de que fuesen traídas.

-Sultana, créame que no querrá saber sobre mi pasado antes de llegar aquí -dijo con una gran melancolía y tristeza jugando con su mano libre el velo de su vestido- es tan triste y doloroso de contar, pero lo único que le puedo decir que aquella familia que deje atrás cuando fui secuestrada... No se le podría considerar una familia por mi parte, solo son las personas que me dieron la vida.

-Allah...

-Así es Sultana, he sufrido tanto que por esa razón me volví una mercader que viajaba por todo el mundo... Mi liberación fue esa, poder escapar y conocer... Olvidar todo lo que viví durante mi infancia y casi adolescencia... El mar es mi hogar.

-Harika, ahora tienes un lugar al que puedes llamar un hogar, tienes ahora una familia contigo Allah te ha bendecido ahora en tener una nueva familia.

-Gracias Sultana.

Harika sin imprevisto abrazo a Mihrimah que se sorprendió en un principio, realmente se sorprendía que por primera vez tuviese una buena relación con alguien que no fuese sus doncellas, su hija o su madre... Especialmente ni Nurbanu tenía una buena relación con ella.

-Gracias Sultana -agradeció sonriendo durante el abrazo que aún permanecía con Miihrimah- por permitirme esta gran oportunidad de poder hacer feliz a su hermano... Allah le bendecirá por completo estos buenos actos que tiene conmigo.

-Harika, por cierto mi madre te ha enviado algunos presentes -dijo una vez separadas de aquel abrazo y las doncellas entraron con algunos cofres- mandó a confeccionar algunos vestidos y a realizar algunas joyas para ti.

-La Sultana no debería molestarse mucho, la corona que me dio antes de partir a Manisa fue suficiente.

En otro lugar.

-Sultana, ha llegado una carta de la Sultana Nurbanu desde Manisa. 

-Gracias Fidan.

Mahidevran se dedicó a leer la carta recién llegada de la Sultana con la que recientemente se estaba uniendo, claramente que solamente era un truco para quitar del medio a Hurrem y a Selim sin que la veneciana se diera cuenta de que también Selim saldría implicado en los daños.

Ella quería poner a Mustafa en el trono, para eso tenía que engañar a Nurbanu, cuando terminó de leer la carta ella se levantó de su lugar bruscamente asustando a Fidan que estaba sirviendo el té.

-¿Son malas noticias, Sultana?

-Esa serpiente de Hurrem... Está jugando sus cartas nuevamente y arruina mis planes por completo.

-¿Qué sucede?

-Hurrem le ha dado una concubina a Selim, una concubina que ha recibido el título de Sultana sin haber dado a luz a un varón -exclamó con enojo mordiendo su labio con una fuerza extremadamente fuerte que se cortó el labio- y no solo eso... Convenció a Suleiman de darle ese título.

-Allah, esa mujer no se cansa de hacer sus maldades.

-No importa... Si logro convencer también a su mujer de unirse a mi lado... Todo estará bien, ella también podría ser manipulable... Mientras ambicionen el poder, siempre buscarán el bando más conveniente.

-¿Está segura Sultana?

-Muy segura, Allah está a mi lado y todo saldrá perfectamente.

Fidan ahora no se sentía tan segura de las palabras de Sultana, por alguna razón sentía desconfianza y algo de temor, su corazón se sentía algo intranquilo.

-Le haremos una visita al Principe Selim en Manisa... Mi querido hijo quiere verlo.

Más tarde.

-Cariño, tienes un tiempo que no has visto al Príncipe Selim -mencionó Mahidevran con una sonrisa tierna sosteniendo la mano de Mustafa- ¿No crees que es momento de ir a verlo? Para que vea que no hay rencores desde que lo nombraron Gobernador de Manisa-

-Tienes razón madre... Selim no tiene la culpa de nada y menos cuando nuestro padre lo eligió a él, para gobernador -habló sonriente dando un gran suspiro sin saber los planes que Mahidevran estaba haciendo- iré a visitar a mi hermano, quiero hablar con él.

-Bien cariño, les diré que preparen el carruaje para ir.

-Gracias madre.

Mahidevran se despidió de él con una gran sonrisa, era fácil de convencer y tratar... Si llegase a ser Sultán estaba segura de que ella lo ayudaría mucho, con sus talentos y conocimientos sería una excelente guía del Sultán y una excelente madre Sultana.

¿Qué más puede pedir? El sultán estuvo cayendo muchas veces en cama, por lo que su destino ya estaba sellado y sí una última vez cae, esa sería la definitiva para que se fuera al reino de Allah. Sus planes iban tan excelente que fue a pedir el carruaje.

(...)

Harika observaba sus colibries los cuales bebían de una flor, el aire tan tranquilo que daba desde su balcón era muy agradable y tranquilo.

-Sultana.

-¿Qué sucede Ali Aga?

-Su Majestad, el Príncipe quiere que se reúna con él -dijo inclinándose, pero también observó a las aves- la Sultana Mahidevran llegará en unas horas.

-Bien, llama a Nazemin, que prepare los baños.

-Si Sultana.

Harika suspiro, sería la primera vez que conocería a Mahidevran... La famosa Sultana que le ha hecho la vida imposible a Hurrem desde su llegada... ¿Por qué repentinamente viene a Manisa? Sabía perfectamente que Mustafa estaba en contra de que Selim haya sido elegido para Manisa.

-Algo trama...

Continuará...

Melifluo [El Sultán] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora