˖۪⸙P R I N C Eˊˎ - minchan ↴

capítulo 13

Era una nueva mañana, el cielo estaba pintado de gris mientras que los cinco estudiantes caminaban por el patio principal del Instituto con camino a la gran carroza que los esperaba, era demasiado temprano y sus ojos lo hacían notar, el sueño estaba filtrado en ellos y sus pasos vagos querían ceder y caer al piso dándose el lujo de por lo menos ahí descansar un poco más.

—Ya no quiero ir. —Jeongin no paraba de quejarse, las palabras que salían de su boca lo hacían de forma lenta y vaga, arrastrándose.

Todos jadearon en acuerdo incluso Seungmin quien aparentaba lucir un poco más despierto, la realidad era que estas no eran sus horas para levantarse, pero, el más afectado, era el príncipe.

Vamos a aclarar algo que los tres estudiantes y el acompañante han aprendido con asombro: Lee Minho, el príncipe con cara de gatito que cuando no sonríe asusta.

Y la verdad es que sí, el príncipe no tenía su sonrisa habitual y el cansancio se veía en cada una de sus acciones, su rostro serio pero postura abatida daban la sensación de que en cualquier segundo se lanzaría a zarpazos con alguien si es que no lo dejaban dormir un poco más.

Los guardias reales no quería ni acercarse así que permanecieron a distancia, solo asegurándose de que los estudiantes subieran a la carroza.

No muy lejos de ellos otro de los Estudiantes caminaba también hasta otra carroza, ésta un poco más pequeña y de colores lúgubres, Christopher fue el primero en verlo y al hacerlo lo saludó con una mano y una sonrisa, el pelirrosa solo dio un leve asentimiento de cabeza para luego seguir su camino hasta la carroza, al ingresar el conductor no dudó en ponerse en marcha.

Jisung suspiró cansado mientras que se apoyaba en el respaldo del asiento, cerró sus ojos mientras trataba de mantener la calma, se dio ánimos internamente mientras que abría lentamente sus ojos, la carroza estaba alejándose del Instituto con camino a Pheak una de las ciudades del Reino Otherper, la ciudad en donde lo esperaban sus padres...

Por otro lado en la carroza en la que iba el príncipe este se encontraba con la cabeza apoyada en el hombro del duque Bang mientras sus ojos se cerraban lentamente, aprovecharía el viaje para dormir y el hombro del mayor era cómodo, muy cómodo, una pequeña sonrisa apareció en su rostro antes de caer de nuevo en un profundo sueño.

Mientras tanto Christopher acariciaba el dorso de la mano del príncipe de manera inconsciente y conversaba con naturalidad con Changbin ignorando a Jeongin y Seungmin que se encontraban jugando a "Yo veo" mientras se pegaban a la ventana de la carroza.

La palma de su progenitor impactó contra su mejilla, el ardor lo recorrió por completo y sus labios se apretaron hasta formar una fina línea, escuchó maldiciones junto al desorden que provocó la caída de todos los artefactos sobre el escritorio, pergaminos regados en el suelo junto a los tinteros y plumas, todo estaba boca abajo junto con el escritorio y la silla, frente a él se encontraba Han Wonho o también, antes conocido, como Han Wonsik, ahora completamente exaltado.

—Debiste hacer algo, cualquier cosa maldita sea, eres un pobre inútil. —declaró el hombre, sus hombros se mantenían crispados mientras tenía su mandíbula tensa y dientes apretados, pero su hijo sabía que aquellas palabras no eran dirigidas para él. —Han pasado ya diecisiete años y todo sigue saliendo mal, no pudiste conservar algo tan simple Jisung, tan simple.

El pelirrosa no se movió de su sitio esperando paciente la siguiente acción de su padre y esta llegó, con un nuevo golpe en su mejilla esta vez más fuerte logrando que cayera contra el piso, no tan lejos de él se encontraba su madre Han Mi quien sentada en el cómodo sillón ignoró por completo el acto concentrando su atención en las gemas en su brazalete.

—Lo siento padre... —se disculpó Jisung aún tirado sobre el piso, sentía el sabor metálico de la sangre colarse entre su paladar, no era sorpresa que su labio ya se encontrara partido, suspiró con desgano antes de pararse nuevamente, no debía mostrarse lo suficientemente débil frente a su progenitor.

—Eres igual que Ye-Na, lo tenías en tus manos y lo dejaste ir. —se encaminó hasta la silla aún tirada sobre el piso y la alzó para luego acomodarla y sentarse sobre ella. —Espero que tengas algo para arreglar este problema Jisung.

El menor lo pensó bien, vió a su madre sentada con naturalidad sobre el sillón importándole poco lo que pasara entre su esposo e hijo preocupada más en el hecho de que quería más joyas para la próxima reunión de las mujeres del pueblo de Pheak, vio a su padre sentado sobre aquella silla dispuesto a matarlo si no tenía algo con lo que arreglar el hecho de que ya... ya no sería el príncipe de Otherper porque el legítimo había regresado.

—No tienes nada... —el mayor de todos rió bajo mientras negaba lentamente con la cabeza. —Te presenté a los reyes con una sola meta Jisung, que consiguieras la admiración de ellos y te eligieran como el nuevo príncipe de Otherper, haz lograda tantas cosas, amenazaste a Myung soo para que este saliera de entre los elegidos, lo mismo con Taeil, y no puedes deshacerte de un simple niño ¡¿QUE RECIÉN ACABA DE LLEGAR?! —la intención de su padre era clara, deshacerse del príncipe a como dé lugar, ya lo había hecho antes, ¿que cambiaba ahora?.

Claro... aquellos imbéciles del pasado no eran rivales contra él pero el príncipe... Minho no parecía ser un estúpido que caería con unos cuantos juegos y amenazas, no, no sería fácil deshacerse del príncipe.

—Lo lograré padre. —estaba seguro de ello, tarde o temprano, no importa como fuera. —Siempre lo hago.

Pero esta vez sería mejor, tendría más ayuda, sabía a quiénes acudir, solo necesitaba... un gran plan.

Uno que le asegurara que todo saldría bien, pero no sería fácil el pensarlo, jugaría primero con el príncipe...