Do you really wanna be alone? {Harry Styles}

Capítulo 19.

Grace.-

Cuatro días. Cuatro días y mis pequeños nacerían. Luke había programado todo con tal de conseguir que sus pulmones estuvieran bien desarrollados y que yo fuera capaz de aguantar el parto.

– ¿Mamá? –La voz de Darcy resonó en el pasillo, dejé la ropa que estaba doblando sobre la cama y fui a verla.

–Estoy aquí, princesa.

Sus rizos comenzaban a tornarse más oscuros a medida que el tiempo pasaba y su cabello crecía. Aún así seguía siendo la viva imagen de Harry.

– ¿Cuándo vendrán el tío Lou y el tío Zayn? –Se afirmó de mi mano y me llevó hasta su habitación.

–En unos días, Darcy –respondí viendo como corría hasta la repisa donde dejaba sus juguetes favoritos–. ¿Estás emocionada por conocer a tus hermanitos?

Se volteó a verme con el ceño fruncido y sus manitos apretando con fuerza el osito de peluche con el que siempre jugaba. Negó una vez antes de ponerse a llorar.

–No quiero que vengan, mami –dijo entre lágrimas y corriendo a abrazarse a mis piernas–. No quiero.

Eran momentos como estos en los que deseaba con ansias no cargar con esta enorme barriga que me impedía abrazar y consolar a mi hija.

Los ladridos de Miles seguidos por la voz de Harry entrando a la casa solo hicieron que el llanto de Darcy aumentara.

–No llores, bonita –murmuré, acariciando su cabello.

Harry llegó a la habitación con la preocupación marcada en el rostro. Miró a Darcy abrazada a mis piernas y la tomó en brazos.

– ¿Por qué estás llorando, Darcy Styles? –Limpió las lágrimas de sus mejillas y quitó el cabello de su rostro con delicadeza. Le tendí la liga para el cabello que tenía en la muñeca y le ató el cabello en para mantenerlo lejos de su carita.

–No quiero que vengan –repitió Darcy–. Ya no me van a querer.

–Por supuesto que te vamos a querer, Darcy –acaricié su mejilla con lentitud y la besé–. Siempre te amaremos, a ti y a tus hermanos, ¿de acuerdo?

–Los padres aman a sus hijos por igual, princesa –comentó Harry con una sonrisa–. Tu abuela me ama mí y ama a Gemma, incluso a ama a tu mamá.

–También me ama –murmuró mi hija.

–Lo hace. Podemos amar a muchas personas, cariño –habló Harry acomodándola en sus brazos–. Te seguiremos amando incluso cuando tus hermanos nazcan, ¿está bien?

Darcy asintió, limpiando cualquier rastro de lágrimas antes de mostrarnos una sonrisa a ambos.

– ¿Serás una buena hermana mayor? –Le preguntó Harry–. Tu mamá es una excelente hermana mayor al igual que Louis y Gemma.

–Seré una buena hermana, papá –respondió Darcy removiéndose para que la dejara en el suelo.

Dejamos que nuestra pequeña jugara tranquila y Harry me llevó hasta la habitación. Apretó su agarre cuando vio la ropa sobre la cama.

–No me iré a ningún lado, Harry –murmuré apoyándome en su brazo–. Simplemente son las cosas que tengo que llevar al hospital.

–Lo sé, pero no pude evitar pensar en que te irías otra vez.

– ¿Recuerdas cuando me preguntaste si quería estar sola? –Pregunté parándome frente a él. Harry asintió en respuesta–. He estado sola, Harry. Y no fue lindo.