Minhyuk se puso rígido.
—Nunca hablo sobre eso.
Hyunwoo conocía los hechos, pero al percibir la fragilidad de su voz comprendió que aquellos hechos no le decían nada.
—Seungwan no es adecuada —respondió, en vez de enfrentarse a él.
—¿Estás seguro?
—Sí. —Se había preocupado por averiguarlo... porque sabía que Minhyuk querría saberlo.
—Menuda mierda... — se frotó la cara con la mano—. Ese tío es un imbécil, pero la ama.
—Ama más la inmortalidad —dijo Hyunwoo, con siglos de experiencia—. De lo contrario, habría esperado a saber si ella también era aceptada.
Minhyuk lo miró con una expresión inescrutable en el rostro.
—¿Aún eres capaz de ver algo bueno en el mundo?
—Si conseguimos matar a Namjoon, quizá llegue a creer que la maldad no siempre gana. —Quizá. Había visto demasiada maldad para creer en los cuentos de hadas que consolaban a los humanos en sus efímeras vidas.
Minhyuk sacudió la cabeza y empezó a caminar hacia la mansión de Nayeon.
—Estoy muerto de hambre.
—Te has echado una buena carrera. —Envió un mensaje mental a Montgomery para que le preparara algo de comer al cazador.
—¿Qué te ocurre a ti si no comes?
Otra pregunta que a nadie se le había ocurrido preguntarle en mil años.
—Me desvanezco.
—¿Te debilitas? —Se agachó, tocó la tierra y se llevó los dedos a la nariz—. Me pareció percibir una esencia, pero no hay nada.
Hyunwoo esperó a que se incorporara de nuevo antes de responder.
—No, me desvanezco literalmente, me convierto en un fantasma. El alimento ancla nuestra forma física.
—Entonces ¿por qué otros ángeles no ayunan? Ya sabes, para conseguir la invisibilidad y todo eso...
—Desvanecerse no nos vuelve invisibles, solo nos... «evapora». Y puesto que la falta de alimento también resta poder, desvanecerse no es algo bueno.
—De modo que, si quiero hacer que un ángel sea vulnerable, tengo que matarlo de hambre.
—Solo si planeas dejarlo sin comer durante cincuenta años. —Contempló el desconcierto y la consternación que aparecieron en el rostro de Minhyuk—. La inanición es un concepto relativo. A diferencia de los vampiros, los ángeles no se desvanecen con facilidad.
—Los vampiros no se desvanecen, se marchitan —murmuró él. A Hyunwoo le dio la sensación de que estaba recordando algo—. Y cuanto más ancianos son, más se arrugan. —Se detuvo al borde de la zona de césped del hogar de Nayeon y alzó la vista para observar la ventana de la arcángel—. Aunque la idea es la misma, supongo.
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Caído
FantasyEl cazavampiros Lee Minhyuk sabe que es el mejor en lo suyo. Lo que no sabe es si será suficientemente bueno para llevar a cabo esta misión. Lo ha contratado el arcángel Soon Hyunwoo, un ser tan bello como peligroso, una criatura que aterraría a cua...